En el artículo sobre “Buenos malos” dije que mi siguiente texto sería la cara opuesta de la moneda y aquí está. Lo prometido es deuda y tras el salto tenéis algunos de los enemigos finales más casposos, cutres, odiosos y sin carisma que mi preciosa cabecita ha sido capaz de recordar. Por supuesto, si a vosotros se os ocurre alguno ya sabéis, decidlo en los comentarios, que esas cosas nos hacen felices. Hala, a flamear de nuevo.
¿Por qué cuando aparece un juego doblado al castellano la gente se queja y si no se dobla al castellano también se quejan?
¡SecuROM con límite de activación en cinco ordenadores! ¡Bieeeeeeeen! Eso es lo que más nos gusta a los jugadores de PC: lidiar con DRM ajenos al propio Steam. ¡Nos encanta! Sobre todo teniendo en cuenta que el juego original no trae más protección que la del propio Steam. ¡Esto sí que es incentivar a los compradores!
Los que empezamos con esto de los juegos con los ordenadores o consolas de 8 y 16 bits tenemos grabado a fuego en la memoria el hecho de que, si querías completar un juego, tenías que hacerlo del tirón. Lo de “salvar la partida” estaba destinado exclusivamente a un puñado de juegos como los RPG o las aventuras gráficas. Empezábamos la partida con un puñado de vidas y teníamos que realizar la proeza de llegar hasta el final. Y eso se conseguía a base de ensayo-error y memorizando la situación de los enemigos, rutinas de los jefes finales y precisión milimétrica en los saltos. Por eso, acabar un juego y ver la pantalla final (muchas veces una miserable frase o simplemente “CONGRATULATIONS!”) era algo al alcance de unos pocos.
Los vencedores escriben la historia… Pero sobre esta historia ya se ha escrito todo lo escribible, así que he pensado que los vencedores también pueden recortar las fotos de sus aventuras y pegarlas en el álbum de Hello Kitty comprado en la papelería de la esquina. Lo ideal sería que los vencedores nos reuniesemos en la cocina para echarle un ojeada y contar batallitas mientras bebemos chocolate y comemos churros. Pero como siempre se cuela algún perdedor, he decidido esconder las fotos más reveladoras, no sea que esos desgraciados descubran algo que no deben.
Mucho se ha comentado esta semana el análisis de nuestro compañero Galious de «Imagina ser mamá». He notado, por los comentarios, que cierta gente se sorprendió de que realmente tuviera el juego y hubiese jugado. Queridos lectores, en EPI somos un equipazo de profesionales como la copa de una secuoya, y testeamos absolutamente todos los juegos, por estúpidos que os puedan llegar a parecer. Para no dejar lugar a la duda, muestro mi colección de juegos para DS, de la cual dispongo en la redacción de EPI cuando necesito realizar uno de mis hamorosos análisis. Tras el salto, of course.
Los señores de SEEEEEGAAAA han confirmado que el famoso título Yakuza 3 verá la luz en Europa y EEUU en Marzo. Yuju. Yakuza es una saga que vende una puta mierda en España, pero si no lo traen enseguida están los frikis con las quejas. Después a ver quién se lo compra, listillos. Yo probé el Yakuza 2, y para cuando llevaba un cuarto de hora de video y todavía no había apretado un botón, me aburrí y puse el King of Fighters, que es igual de japo y hay más hostias. PS3 only, pedazo de exclusivaza, os vais a comer al Mass Effect 2. Os dejo con un video de la demo, casi nueve minutacos para pegarte con cuatro mafiosos cutres. Apasionante.
Junto con los videojuegos «para todos» aparecieron las dos etiquetas que ya están en boca de todos los foros y blogs: «Casual» y «Hardcore». Mientras los «Casual» van a su puta bola, sin meterse en fregaos, los «Harcore» ponen el grito en el cielo por cualquier cosa relacionada con las consolas de Nintendo. Normalmente, sin criterio, puesto que lo mas cerca que han visto un juego casual es cuando acompañan a su mamá de compras al Carreful.
En el Pixel Ilustre ya no se nos podrá señalar con el dedo. Y es que, señores, los tenemos así de gordos….
Después de leer con pausada atención el análisis de PlaboPein mientras me cortaba las uñas de los pies, creo que estoy en disposición de ofrecer una réplica justa y argumentada. He diseccionado los elementos analizables más característicos del título y he obviado los elementos de producción, ya que a todas luces presume de un gran apartado Gráfico y Sonoro (con el maestro Zimmer de compositor principal). Pero como, en general, en El Pixel Ilustre nos la trae al pairo los gráficos y los sonidos (a menos que aporten algo realmente innovador) me paso por el forro los modelos Hi-Poly y las luces dinámicas y suputamadre en alta resolución.
Hace ya más de diez años que toda la comunidad de videojugadores se puso de acuerdo en alabar el precioso vestido de seda invisible del Emperador Kojima. Algo que, por otra parte, tampoco es tan extraño en un sector acostumbrado a idolatrar dioses de plástico. Lo que sí es extraño es que todavía ningún niño irresponsable haya señalado al emperador al grito de: ¡Mirad todos, está desnudo! ¡Está desnudo! Pues ya iba siendo hora…
Coge el Puzzle Quest, quítale la mitad de los detalles que lo hacían tan grande y hazlo aún más pesado en la recta final, añádele el cansino diseño de personajes de Square-Enix, el sistema “Bejweled Twist” de PopCap y un rollo pokemoniano totalmente prescindible y aborrecible. Voila: Gyromancer.
Modern Warfare 2 es un juego tan, tan grande que no sé ni por dónde empezar este análisis. Al llegar con unas pocas semanas de retraso, tengo el privilegio de saber qué opinan más o menos las demás publicaciones sobre esta segunda entrega (o sexta, si hablamos de la saga Call of Duty), probablemente la que más expectativas ha creado de todas las que llevamos hasta el momento. Y la verdad es que he encontrado de todo: unos critican su guión, su campaña y su duración; otros, sin embargo, se centran en el multijugador (que según creen podría disfrutarse más –si cabe- con un ligero toque de gracia) o en la crudeza de una de sus misiones. Yo no veo ni lo uno ni lo otro, así que como siempre, tras el salto, tenéis mis impresiones sobre este título que todo el mundo califica, aún con todo, como sobresaliente.
Ahora, gracias a Gamestop, podemos convertirnos en el protatonista del momento «NINTENDO SIXTY FOOOOOOOUR!!!» usando nuestra foto. O no.
Tras el salto, la versión ilustre del vídeo.