Con la segunda entrega de la saga a la vuelta de la esquina decidí brindarle a The Witcher la oportunidad que hace tres años, por motivos que ya ni recuerdo, negué. No os voy a decir simplemente que me ha gustado, porque para ello no estaría inventándome una categoría nueva; os voy a decir por qué, si en algún momento de vuestras vidas habéis pensado que os gustan los RPGs, deberíais estar jugándolo.
Bienvenidos a una nueva y esperemos que exitosa sección del Pixel Ilustre en la que prometemos traeros cada viernes lo mejor y más bizarro del mundo de los videojuegos en flash. Para esta ocasión he elegido un juego de puzzles adictivo de la hostia que, a mi me tuvo una jornada laboral entera la mar de entretenido. Así que echádle un ojo solo si tenéis tiempo libre por delante porque entre los logros y las decenas de niveles igual os quedáis toda la tarde haciendo el canelo por aquí.
No hay duda que los Logros (en XBox360) y Trofeos (en PS3) son un invento cojonudo: gracias a ellos exprimimos un poco más los juegos que nos han costado un buen dinerito, disfrutándolos de una forma que probablemente no haríamos si no estuvieran ahí para poner a prueba nuestro talento a los mandos, además de para fardar de járcor pleyer con los colegas y en los foros. Sin embargo, hay veces que esos logros o trofeos ponen más a prueba nuestra paciencia antes que nuestras habilidades.
Si ayer en Vidaextra leíamos que Monster Hunter Tri podría tener mejores gráficos que el próximo Zelda, hoy una fuente confidencial me ha confirmado que Halo Reach, el próximo truñaco de Bungie, podría superar gráficamente a Uncharted 3. La misma fuente aclaró que lo más probable es que no sea así, pero oye, poder lo que es poder, puede. Total, puestos a escribir titulares absurdos mejor hacerlo con algo de gracia – aclaró mi simpática y confiable fuente.
Extender una saga hasta el infinito no es cosa de hoy en día. Electronic Arts ya tenía clara la idea de que si algo destacaba y era estimulante para el público, lo propio era coger esa fórmula y llevarla lo más lejos que el mercado les dejase. Exactamente eso fue lo que paso con la saga Strike, que se inició en 1992 con Desert Strike y murió en 1999 con el último port de Nuclear Strike para Nintendo 64. Hasta hoy no hemos vuelto a saber nada de esta genial franquicia, así que es hora de mirar atrás y recordar aquellos cinco títulos.
HAMO a esta mujer. La hamo con la fuerza de los mares y el ímpetu del viento. No sólo se dedica a hacer goodies que van desde una corbata del Monkey Island a una Guitarra del Guitar Hero del LOOM, sino que es capaz de viajar desde Madrid a San Francisco y regalarle a Tim Schafer en persona unas Zapas customizadas del Day of Tentacle. Por favor, visitad su blog y ponedlo en favoritos y en vuestros RSS y poned una foto suya de wallpaper para dar un rayo de luz celestial a vuestra tristes vidas. No os perdáis el molde para galletitas del tentáculo o el genial postre India Jones and the Cake of Atlantis. Impagable.
Y es que los chicos de RedLynx no tenían otra manera mejor de celebrar su éxito con Trials HD que rebajando hasta un precio de risa su grandioso Trials 2 Second Edition, un juegazo como la copa de un pino para PC al que podéis acceder por menos de lo que cuesta un cubata. Mucho menos, si eres como nosotros y le das al alpiste en exclusivas discotecas solo aptas para ilustres. La oferta está disponible únicamente hasta el 14 de abril, así que aligerando porque después volverá a costar 9.99$. Eso sí, nada de buscarlo por Steam: pinchad aquí para acceder directamente a su web oficial y proceder a la compra. Por suerte no es Play.com y salimos ganando con el cambio a euros.
Vía: Destructoid
El mundo de los videojuegos avanza a pasos agigantados y los juegos quedan obsoletos en cuestión de meses. Lo que hace unos años nos parecía divertidísimo ahora puede aburrirnos como ostras sordomudas. Los géneros crecen, evolucionan y se sofistican y, aunque nos pese a algunos, muchos quedan apartados a un lado del camino para no volver. Son los Géneros Perdidos.
Aunque ahora mismo se está produciendo el concurso mensual… ¡¡Os traemos un nuevo concurso!! Todos sabemos que nuestros lectores vestís de forma ilustre pero nunca está de más añadir una prenda nueva a vuestro repertorio. Es por ello que gracias a los amigos de GhostClothing os traemos la oportunidad de haceros con el primer módelo que esta ilustre tienda saca a la venta.
Creo que todos estaremos de acuerdo al afirmar que Just Cause fue un auténtico despropósito de juego. Bueno, todos no… Un amigo mío podía pasarse horas y horas contándome anécdotas de todo lo que había hecho y dejado de hacer en San Esperito, siempre con una sonrisa en la cara y asegurando que el título era nefasto técnicamente pero divertido como pocos. Al menos lo era a causa de las estrambóticas situaciones a las que el título te conducía sin remedio. Por suerte, Just Cause 2 se queda con esa relativa diversión y se perfila como un juego muchísimo mejor que su antecesor. Pero mucho, mucho. La única pega es que sus creadores son los mismos que los de la primera entrega, y desgraciadamente algo de polvo han arrastrado por el camino…
En muchos videojuegos, principalmente JRPGs, tenemos la posibilidad de participar en entretenidos minijuegos que forman parte de la historia. Algunos son más importantes y otros lo son menos, pero si están bien hechos pueden suponer un excelente respiro con respecto a la jugabilidad normal del título en cuestión, a la vez que un fuente de vicio y adicción extra. En este artículo, pues, voy a tratar de recopilar precisamente eso, los mejores minijuegos que podemos disfrutar dentro de la historia principal del juego. Es decir, que nada de modos de juego extra de juegos de lucha ni nada parecido.
Pistolas, katanas, escopetas, golpes de artes marciales, sombreros de cowboy, perillas de maestro Miyagi, hordas de ciber-samuráis y duelos bajo el sol. Todos estos elementos se dan cita en mayor o menor medida en el nuevo shooter en primera persona de Ubisoft, que lejos de componer una obra original y carismática, forman uno de los peores batiburrillos de ideas que he tenido la desgracia de padecer en un videojuego.