Red Faction Guerrilla salió hace unos cuantos meses para las inferiores PS3 y (especialmente) XBOX360, por lo que posiblemente la mayoría de vosotros ya lo hayáis jugado y/o leído otros análisis. Así que en este artículo en lugar de aburriros con las mismas tonterías que podéis encontrar en cualquiera de los mencionados análisis, me voy a centrar en los factores exclusivos (y posiblemente desconocidos para la mayoría) de esta versión para PC
En primer lugar, la versión PC de Red Faction Guerrilla viene con un par de modos de juego online adicionales. Modos de juego que por otra parte no he probado y posiblemente no pruebe, porque yo soy de jugar solo hasta al Left 4 Dead (tru store, Kirkis puede atestiguarlo). Además, incluye la posibilidad de jugar en LAN, la expansión “Demons of the Badlands” (en la que controlamos a una merodeadora maciza) y unos cuantos mapas extras con respecto a las versiones de consola. Si con esta cantidad de contenido adicional no te basta, quizás te agrade saber que el juego incluye como chorricientos logros de esos que tanto les gustan a algunos. Yo de verdad que todavía no les veo la gracia…
El apartado técnico, si bien no es perfecto, sí que está bastante más pulido que en Saints Row 2, el anterior juego de Volition que tuvo la desgracia de salir en PC. Tenemos cerca de una decena de opciones gráficas que podremos ajustar para mejorar el rendimiento, que por otra parte no es del todo bueno. Y es que a pesar de que el juego corre bastante bien en un ordenador de gama media como el mío, en cuanto hay un par de edificios desplomándose y media docena de explosiones en pantalla el frame rate sufre bastante. Lo cual es una pena, porque si algo hay divertido en este RF: Guerrilla es demoler edificios y causar explosiones. Aún así, está mucho mejor optimizado que títulos como el mencionado Saints Row 2, GTA IV o Wheelman (por mencionar juegos de estilo similar).
Ya sé que dije que no os iba a soltar ningún rollo que ya sepáis. Pero es que estamos hablando de un juego en el que puedes machacar gente a martillazos, volar todo tipo de edificios y estructuras, usar robots mecanizados, planear con un jetpack acoplado a la espalda, atropellar a gente con enormes vehículos marcianos o desintegrar soldados enemigos con un lanzador de nano-partículas entre otras muchas cosas. ¡¡Lanzador de nano-particulas!! ¡¡Jet-pack!!
Por último, el juego cuesta algo menos de treinta euros (21 si sabes buscar bien). Un precio más que razonable teniendo en cuenta la cantidad de modos de juego y horas de diversión que ofrece. Así que si como yo, eres de los que disfruta de juegos superiores en sistemas superiores, no lo dudes: éste Red Faction: Guerrilla es una bomba que no te deberías perder.
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