Análisis: Runaway-The Dream of the Turtle

Los que rondamos la treintena recordamos con cariño las aventuras gráficas, género que dominaba el catálogo de juegos para PC a principios de los años 90. El genero pasó de moda y desapareció durante unos años, salvo contadas excepciones.

Afortunadamente para los que nos gustaba calentar nuestro cerebro y soñar por las noches sobre cómo utilizar el maldito pollo de goma con una polea en medio™ el genero parece repuntar y van apareciendo poco a poco nuevos títulos o remakes de esos juegos que tanto nos gustaron. Uno de estos juegos es Runaway-The Dream of The Turtle, desarrollado por la compañía española Pendulo Studios.

Desgraciadamente, me gustaría poder decir más cosas buenas sobre este Runaway…

NOTA: LA VERSIÓN ANALIZADA CORRESPONDE A LA VERSIÓN PARA NINTENDO DS

Y HABRÁ SPOILERS. AVISADOS ESTAIS.

Una portada enseñando cachete vende por sí sola

No es por el carisma del protagonista Brian Basco, no es por el guión, no es por los gráficos (cojonudos, por cierto) o el sonido. Runaway-The Dream of The Turtle (Runaway 2 a partir de ahora para abreviar) falla en el sistema de puzzles que caracteríza el género de las aventuras gráficas.

Antes de seguir leyendo, os recomiendo echar un ojo al artículo Why Adventure Games suck (and what we can do with It) de Ron Gilbert (Traducción al Español por cortesía de Ion Litio). Escribió este artículo en 1.989 y, si os dais cuenta, las grandes Aventuras Gráficas de LucasFilm Games siguen estos consejos a rajatabla. Runaway 2 no.

El juego está dividido en 6 capítulos, cada uno con varias localizaciones. A partir de ahí, tenemos que resolver una serie de acertijos para finalizar el capítulo. El problema es la linealidad de los acertijos: no accedemos a un «puzzle» hasta no haber resuelto al anterior. Y tampoco accedemos a las piezas del puzzle. Algunos ejemplos concretos:

-Buscamos en una caja de herramientas y nos dice «No hay nada interesante». Sin embargo, mas adelante, en el siguiente acertijo, si buscamos ese objeto que necesitamos y no hemos encontrado arrastrando el Stylus por toda la pantalla, está en la caja de herramientas (Aaaaah… Ahora SÍ es interesante). Este principio se da varias veces en los diversios capítulos del juego, con lo que al final la tónica general era comprobar todo lo comprobable otra vez.

-Tenemos que emborrachar un mono que nos arroja caca y no nos deja pasar. Está clarísimo: tenemos una botella de whisky desde el principio de la aventura y se la tiene que pimplar el simio por cojones. También tenemos desde el principio un perrito de juguete que mea. Está claro: usar whisky con perrito y darselo al mono para que haga su botellón de la jungla. Pues no. No funciona. Pruebas otra vez. No, tampoco.

Para emborrachar al simio, hay que llenar el perrito con agua, darselo al mono, el mono bebe agua y tira el perrito, coger otro perrito y, esta vez sí, llenarlo con whisky. ¿Para qué si estaba tan claro que el whisky era para el mono desde el principio.

El agua para los peces

-Hay objetos o puzzles a los que accedemos mediante conversaciones con los demás personajes. Alguna información u objeto relevante no estará disponible hasta que no demos con la frase correcta, que puede estar oculta entre las lineas y lineas de interminable cháchara que tienen algunos personajes, y esa frase mágica puede aparecer totalmente camuflada entre temas secundarios del diálogo.

-Vale que queremos algo de complicación, pero siempre que esté dentro de la lógica. Atención a este acertijo:

• Para obtener el preciado objeto que es un cuaderno, debemos proporcionar a nuestro amigo Saturno un «invento» para que la gente coma mas lentamente
• Para ello, primero de todo, «usamos» unas botellas de vino con ¡UN PASILLO! para ir a nuestra habitacion y marcarnos un kalimotxo en alta mar.
• Después usamos un saco de tierra especial para marihuana para llenar una de las botellas
• Las unimos con unas bridas de plástico formando una especie de reloj de arena
• A eso le pegamos con otra brida el tridente que hemos arrancado de una estatua de Neptuno
• Y ¡TACHÁN! ya tenemos un «tenedor gigante con cronometro» para nuestro amigo Saturno

Lógico, divertido y apasionante a la vez.

A mí me pasaba algo parecido: tenia dos pequeños Galious que me decían que quitara ese juego y pusiera «Imagina ser Mamá». Les hice caso.

Detalles como éstos son los que me han quitado las ganas de aventuras gráficas por un tiempo.

Después está el tema de la bastante floja conversión a Nintendo DS. A pesar del sistema de Zoom (agrandamos la zona a la que señalamos con el Stylus) y la ayuda (se colorean los objetos con los que podemos interactuar. De otra forma sería imposible distinguir nada), los cojonudos gráficos se ven bastante mal en la Nintendo DS. Parece como si simplemente hubieran reducido la escala de los gráficos con lo que los personajes, especialmente en movimiento, se ven asquerosamente pixelados. Solo se usa la pantalla táctil para jugar y la pantalla superior queda relagada a enseñar el inventario.

No se ve mucho mas grande que esto

Además, los videos y cinemáticas están a una compresión altísima y, directamente, se ven como el culo. No merecen perdón por dejar que unos videos se vean tan asquerosamente mal.

El sistema de control mediante el Stylus es sencillo pero es mejorable: con los botones L y R cambiamos el tipo de acción o el objeto del inventario. Además, tuve problemas a la hora de las conversaciones: muchas veces no elegía la frase que señalaba sino otra cercana, con el consecuente cabreo si la parrafada era especialmente larga.

En resumen, solo si te gustan MUCHO las aventuras gráficas te recomiendo este Runaway 2. Y si decides pillarlo, ve a por la versión de PC y podrás difrutar de los gráficos de este juego y está baratilla.