Análisis: Tomb Raider Anniversary (Wii)

Escrito por en Análisis - 31 marzo, 2010

Tomb Raider Banner copia

Si tuviera que hacer un TOP 5 de PSOne, mis 5 juegos serían Resident Evil, Suikoden, Medievil, Castlevania: SOTN y Tomb Raider. Afortunadamente (o por desgracia), tres de estos títulos han sido “remakeados” para disfrute de los que les gustó el juego original y enganche de nuevos jugadores a la saga.

A falta de probar Medievil Resurrection, el remake de Medievil para PSP, mi experiencia con el Remake de Resident Evil ya no fue muy satisfactoria, pero aún así me embarqué con Tomb Raider Anniversary para Wii, juego que compré casi al mismo tiempo que la consola pero hasta hace poco no le dediqué el tiempo que se merece.

Al contrario de otros “Remakes”, Tomb Raider Anniversary no es una conversión exacta del título que hizo famosa a la pechuga más voluminosa de los videojuegos la arqueóloga más intrépida desde Indiana Jones, sino que se inspira en el desarrollo de los niveles del primer juego, cambiando algunos elementos, sucesos y diseños.

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De los polígonos a las curvas

La adaptación a Wii es más que correcta. Pese a que los gráficos apestan a cutre-port de PS2, se incorpora el uso del Wiimote como puntero para apuntar con las armas (se elimina el apuntado automático de PSOne, cosa que incrementa la dificultad) o alumbrar con una linterna (nueva incorporación). Se añade un gancho para llegar a algunos sitios de difícil acceso y, pese a que casi todo el tema de saltos recae en el botón “A”, el control es bastante sencillo e intuitivo. Además, se incluyen unos cuantos “minijuegos exclusivos” como encontrar grabados, descifrar jeroglíficos o abrir “complicadas” cerraduras que llevan milenios cerradas.

Minijuego

Los mecanismos de los antiguos egipcios funcionan a la pefección durante milenios

El problema de Tomb Raider Anniversary no es debido a nada de eso: ni los gráficos, ni el sonido, ni la jugabilidad, ni el control. El problema viene de la base: lo que nos atrajo de Tomb Raider hace 10 años ha quedado obsoleto y ha sido superado por otras sagas como Prince of Persia o Assassin’s Creed. La mecánica de trepar, escalar y llegar hasta el final de esos despoblados escenarios, tan desprovistos de enemigos como un juego de “Imagina ser…” nos parece a día de hoy aburrida y repetitiva. Los escasos momentos de emoción los tendremos cuando nos enfrentemos a un gorila, un oso o un dinosaurio que lleva siglos sin comer encerrado en un laberinto (literalmente), cosa que ocurre en contadas ocasiones. El resto, te cansarás de ver como Lara se desnuca cayendo desde las alturas.

tranniversary

¿HOOOLAAA? ¿HAY ALGUIEEEEEEN?

En resumen, Tomb Raider Anniversary puede resultarte relativamente entretenido si jugaste y disfrutaste el primero. Es un remake bastante digno, pero no deja de ser un juego que resulta algo aburrido si lo comparamos con los cánones de diversión actual. Si nunca has probado un Tomb Raider, ni te acerques a este juego. Limítate a pedir que Lara Croft esté en todas las listas de buenorras videojueguiles.

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