Bullfrog siempre nos propuso jugar a ser dioses, a sentir en nuestras manos la responsabilidad de gestionar desde las vidas de los mortales en Populous, hasta enfermos en Theme Hospital. Todo ello sin olvidar algunos pepinacos como Syndicate, Magic Carpet o Dungeon Keeper. Pero si tuviera que quedarme con alguno de sus experimentos ese sería sin lugar a dudas ese simulador de parque de atracciones endiabladamente adictivo que fue Theme Park.
Theme Park fue lanzado originalmente para PC en 1994 y rápidamente fue ganando popularidad hasta convertirse en uno de los juegos de ordenador más famosos por aquel entonces. Las conversiones a consola estaban a la orden del día e inevitablemente sería portado a numerosas plataformas, entre ellas 3DO, Mega Drive, Super Nintendo, Atari Jaguar, Mega CD, SEGA Saturn, Playstation, Amiga y Nintendo DS.
A estas alturas seguro que ya sabéis como funcionaba esta joyita de Bullfrog. Nuestro objetivo era hacer prosperar un parque de atracciones de la manera más eficiente, ganando pasta para poder situarnos entre los parques más valorados del mundo y poco a poco ir accediendo a nuevas zonas a las que transportar la magia de nuestras creaciones. Theme Park era jodidamente viciante y satisfactorio. El ver como tu parque crecía poco a poco e iba haciendo caja ante la avalancha de visitantes ávidos de emociones fuertes era toda una experiencia. Veamos cuales eran las características que hacían de este simulador uno de los más divertidos.
En primer lugar teníamos que comprar un terreno con el dinero inicial, a partir de aquí nuestra tarea era coger esa parcela y transformarla en un espectacular parque. En un principio no serían muchas las atracciones que podíamos construir, pero a medida que pasaba el tiempo y el parque iba ganando fama, la oferta aumentaba, apareciendo cada vez atracciones más caras y bonitas, capaces de dar a nuestro parque el salto de calidad que necesitaba para seguir entre los mejores. Al igual que las atracciones, también existían otro tipo de tiendas y establecimientos típicos en estos lugares, como tómbolas, hamburgueserías, salones recreativos, tiendas de souvenirs y un largo etcétera.
Cosa más bonica por dios, se me salen los lagrimones
Theme Park sabía mantener enganchado al jugador regalándole poco a poco nuevas construcciones con las que satisfacer a los visitantes. Cuando íbamos viendo que nuestro parque crecía y ganaba visitas nos invadía una satisfactoria sensación. Teníamos que ser avispados a la hora de colocar las atracciones y recintos, ya que una decuada localización a veces era clave. Por ejemplo, colocar una tienda de refrescos al lado de la hamburguesería era una práctica habitual por todos los que jugaban a Theme Park, así como crear un feedback entre establecimientos similares o que podían ofrecer servicios complementarios.
De nuestra mano también estaba la distribución de los caminos y las colas para las atracciones, así como los elementos decorativos que daban un toque majestuoso al parque como fuentes o árboles. También debíamos contar con una plantilla de trabajadores que velase por el funcionamiento de las instalaciones y el bienestar de los visitantes. Podíamos contratar animadores para mantener contentos a la gente, limpiadores para tener los caminos libres de la porquería que los cerdos iban dejando atrás y mecánicos para reparar las atracciones. Al mismo tiempo era recomendable tener algún que otro segurata para evitar la entrada de unos gamberros que llegaban en moto y al entrar empezaban a tocar los cojones y a pinchar los globos de los felices consumidores.
¡Qué simpaticón era el señor de las ayudas!
En cuanto a los entresijos económicos teníamos total libertad para juguetear con el precio de las entradas, el sueldo de los empleados, invertir en bolsa, llegar a acuerdos con proveedores y sindicatos o invertir en nuevas tecnologías. Era prioritario controlar todos estos aspectos si queríamos evitar huelgas o quejas por parte de los visitantes y trabajadores. Al mismo tiempo, Theme Park ofrecía la posibilidad de modificar el precio de las tiendas, así como otros aspectos como el ratio y probabilidad de éxito en los juegos, fijar el valor de los regalos, controlar el nivel de sal o hielo en algunos productos y un gran número de aspectos.
Las atracciones también eran manipulables, podíamos aumentar o disminuir la velocidad de las mismas o cerrarlas cuando quisieramos. Cuando avanzábamos bastante en la partida tendríamos a nuestra diposición un tipo de atracciones que eran totalmente personalizables, como montañas rusas a las que podíamos colocar los loopings que quisieramos y darle la forma que nos saliese del pito. Lo mismo pasaba con los rápidos o las pistas de karts, donde teníamos libertad para construirlas como nos apetecía.
Cuando nuestro terreno estaba totalmente completo y no disponíamos de espacio podíamos ir comprándolo, aunque también se ofrecía la posibilidad de vender el parque. Esto era primordial, ya que el objetivo principal del juego era ir accediendo poco a poco a países más ricos y con un mayor nivel de vida. Comprar terrenos en esos países era imposible sin vender antes nuestro parque. Dolía dejar atrás aquellas bonitas creaciones que tanto tiempo nos había llevado, pero no quedaba otro remedio si quieríamos avanzar en el juego e ir descubriendo nuevas sorpresas.
Versión para Mac
Theme Park fue recibiendo nuevas versiones y mejoras con el tiempo, pero nada como el juego que era en sus comienzos, con la magia de aquellos gráficos y el excelente y simpático diseño de sus elementos. Sin embargo, en Nintendo DS recibimos una adaptación muy fiel de aquel primer Theme Park que pudimos disfrutar en PC y consolas de 16 bits. Curiosamente, hablando de ese juego inauguré mi antiguo blog, hay que ver como pasa el tiempo.
A día de hoy no tenéis excusa para echarle el guante a esta obra atemporal. Existe en un buen número de plataformas, podéis tirar de emulador o hacer lo que os de la gana, pero si os molan los juegos de construcciones y erais de los que se comían los bocadillos de nocilla delante de la pantalla rezando para que aumentara la población de vuestra ciudad en Sim City 2000, Theme Park es vuestro juego.
yo lo quiero, en donde lo puedo conseguir?
http://coolrom.com/roms/snes/3174/Theme_Park.php
ese es el ROM pero debes también descargar el emulador requerido que lo puedes hacer desde esa misma página :) espero te sirva (yo lo tengo y me sirve muy bien)