Los que llevéis ya un tiempo por estos lares sabréis que, salvo deshonrosas excepciones, por norma general suelo ser muy benevolente en mis análisis. Los dos motivos de este comportamiento bonachón detrás del teclado para con la mayoría de videojuegos son los siguientes: uno, tiendo a jugar a lo que me da la gana independientemente de que me lo hayan mandado o no; y dos, me auto sugestiono en la medida de lo posible para disfrutarlos al máximo. ¿Por qué? Porque por si no ha quedado claro con el título de la entrada, me gusta que los videojuegos me gusten… aunque a veces no sea fácil.
A veces no es fácil porque hay juegos muy malos. Juegos que por regla general intento evitar a toda costa, pero que en ocasiones me atrapan gracias a encantos tales como una publicidad engañosa, el «hype» desmesurado, la nostalgia empleada como arma traicionera, o directamente un precio muy bajo. Porque sí, amigos, aunque penséis que los redactores del Pixel Ilustre nadamos en piscinas de videojuegos regalados por las distribuidoras mientras «boothbabes» de varias compañías nos masajean la entrepierna, lo cierto es que por norma general nos tenemos que comprar los videojuegos (FUNFACT: ocho de mis últimos diez análisis salieron directamente de mi bolsillo). Y como todo el mundo sabe, no hay nada más tentador (culos aparte) que un juego barato.
Por eso, cuando debido a uno de estos motivos termino con un juego de mierda instalado en mi querido ordenador (o iPhone), me desilusiono. Me desilusiono profundamente y me pongo triste. Porque yo lo he puesto todo de mi parte para disfrutar el juego, me he entregado en cuerpo y alma al título en cuestión, se lo he dado todo: mi tiempo, mi atención y mi dinero. ¿Y qué he obtenido a cambio? Expectativas defraudadas, un producto de bajo nivel o, directamente, mierda. ¿No os sentiríais vosotros traicionados? Para mi es como una jodida puñalada en el pecho. Sobre todo cuando pienso que podría estar jugando, o lo que es lo mismo, dedicándole mi preciado tiempo a cualquier otro de los muchos juegos que tengo esperando encima de la mesa, en la cola de Steam y en la memoria del iPhone.
Dramatización de mis juegos «por jugar»
Pero como ya he dicho, normalmente no sufro este tipo de traiciones videojueguiles. Por suerte tengo un privilegio que comparto con todos vosotros, queridos lectores, y es que puedo jugar a lo que me salga de los cojones. Esto, que puede sonar bastante tonto, no lo es tanto en cuanto conoces como funcionan las cosas entre bambalinas… pero bueno, esa es una historia distinta que si queréis discutiremos en otra ocasión. El caso es que cada vez que me pongo delante del monitor a jugar es porque realmente tengo ganas de estar ahí. Cuando empiezo a darle caña a un juego nuevo soy consciente de que podría estar haciéndolo con otros veinte distintos, pero si estoy con ese en cuestión es porque tengo la esperanza de que me fascine. Mi ilusión, vaga y bastante infantil, es que cada RPG me haga sentir lo que Fallout, cada shooter lo que Duke Nukem y cada aventura lo que Monkey Island. Y creedme, a poco que se aproximen ya tienen ganado mi corazón.
Los que llevéis un par de años por aquí sabréis que el primer diez de esta santa casa fue a King’s Bounty: The Legend, un juego ruso pasto de las ofertas de cinco euros, que a mi me hizo sentir como un niño de diez años jugando por primera vez a Heroes of Might & Magic 2. Por eso mi segunda nota perfecta fue a Divinity 2: Ego Draconis, un juego quizás no sea un juego perfecto (de hecho dista mucho de serlo), pero que desde luego sí me brindó una experiencia perfecta. Una experiencia para la que, todo sea dicho, yo iba muy predispuesto, pero es que no puedo entender a esos redactores / analistas / bloggers / o lo que coño sean que juegan a juegos sin ganas, por jugar, o simplemente para salir del paso.
En el lado opuesto de la balanza tenéis mis análisis de Torchlight y Dark Void, dos juegos que, por diversos motivos esperaba como agua de mayo, y que por supuesto me defraudaron salvajemente. Ahora bien, ¿quería yo que me defraudasen? No. ¿Disfruté yo puteando los juegos en cuestión? No. ¿Me gustó dedicarles entre seis y doce horas por cabeza para conseguir una satisfacción más propia de un buen pedo que de un videojuego? Ni de coña.
AMO a este juego
La conclusión, por si acaso no ha quedado suficientemente clara a estas alturas del artículo, es que no sólo me encantaría poder decir que todo lo que pasa por mis manos es una obra maestra, sino que hago lo posible por que así sea. Que hay que perdonar un apartado gráfico lamentable, se perdona; que hay que hacer oídos sordos al doblaje, se le hace; que es necesario obviar el argumento para no pegarse un tiro, se obvia… lo que sea con tal de sacar lo mejor de un videojuego. Y si pensáis que esa no es la mentalidad propia de alguien que debe valorar de forma crítica un videojuego porque su juicio puede (o no) influir en la compra de un determinado título, que os zurzan. No me gusta la imagen del crítico gilipollas tan extendida en todos los medios y no voy a contribuir a ella. A mi los juegos me gustan, y lo más importante, me gusta que me gusten.
Totalmente de acuerdo, a veces se nos olvida a los que amamos los videojuegos que los jugamos para disfrutar y no pasar un mal rato.
Un articulo precioso, da que pensar. La cabecera me trae recuerdos de mi mas tierna infancia, unos cuantos años mas joven que tu era cuando jugue al primer Heroes.
Solo dos pegas: para cuando un articulo del SC II? Y para cuando uno del SC II? :-D
Uf, pero es que hay que reconocer que hay juegos fabulosos que tienen partes absolutamente soporiferas y hechas para desesperar, y lo digo porque acabo de sufrir exactamente eso con el Flower, Sun and Rain de la DS. Dicho esto yo disfruto el 90% de lo que juego, el otro 10% suelen ser deslices, y eso que hay muchas veces en las que juego simplemente por jugar, a cosas que ni conocia. Asi se descubren grandes joyas entre los extensisimos catalogos…
Lo que creo que ha pasado es que se ha sobrevalorado casi todos los puntos de un videojuegos, por lo que uno no se puede salvar por una gran jugabilidad sino por historia, graficos y otros aspectos.
Como ya dije los analisis no determinan el exito o fracaso de un titulo directamente y es mejor que la gente vaya diciendo lo que piensa, siempre que no se intente ofender
Los videojuegos son un coñazo, a mi me gustan que sean cortos y facilicos para que no me den mucha guerra. Muchas veces ni juego para analizarlos, porque estos me obligan que si no…
Como todo producto artistico, un juego puede flaquear en algunos aspectos y tener otros sobresalientes, pero lo que importa es que tenga «alma», ese «noseque» que te llama a jugarlo cada vez, ya sea por su historia/jugabilidad/graficos y demas. Por eso no me gusta mucho los superventas, apuntan todos a lo mismo pero no proponen nada nuevo o llamativo, todos tienen unos graficazos, una historia epica y una jugabilidad genial (bueno, no todos, pero a eso apuntan), y todos se convierten en un producto mas de la fabrica; los que los analizan diran «si, es un excelente juego por tal y tal motivo» pero dudo mucho de que lo hayan disfrutado de verdad.
Estupenda filosofía. Yo siempre me lanzo a los videojuegos esperando sacar algo de la experiencia. «Puede ser injugable, pero la historia es la leche…» «Puede no tener historia, pero mola pegar tiros a los malos…» «Puede no aportar absolutamente nada, pero es uno de los ejemplos más perfectos de su género…»
Eso sí, si te dedicas a las reseñas también hay que escribirlas de modo que queden claros los motivos por los que te ha gustado el juego, porque pueden ser los mismos motivos por los que otra persona lo odie.
Y en esta forma de disfrutar me centré yo a la hora de realizar mis análisis: Una no jugar a juegos que no me llamen la atención, como las compas no dan mucho tirar de poor pocket gamer and oferts. Y por último, ser benevolente y obligarte a que un juego te guste, a sacar aspectos positivos y hacer crítica constructiva con los «defectillos». Gran artículo señor, directo a Una Maravillosa Libreria.
Perdon por el doble post pero me mata la curiosidad por saber que juego es el que esta en la cabezera del artículo. Y perdon de antemano por si es algún clásico
@Trasto: por mi parte no leerás nada relacionado con StarCraft II, no he jugado nunca al primero y no creo que vaya a jugar al segundo.
@Aaron: es el Heroes of Might & Magic 1
Asi se habla!!
Caramba..
Voy a probar el Ego dragonis 2 como dios manda, que lo deje de jugar, porque el tio no podia tirarse por un precipicio, habia como una barrera invisible de esas que tanto odio.
Discrepo con un par de frases tuyas Andresito@ Yo creo que uno puede ser super crítico sin ser un perfecto gilipollas.
Con Dark Void me paso como a ti, mucho ruido (expectación) y poquitas nueces. Pues le di el mejor tratamiento que pude, el que le hubiera dado a un juego que me parezca la polla, recogiendo los máximos detalles que pude, creandole una (en mi opinion) buena introduccion.
A mi que el juego me guste o no me es casi indiferente. Lo que me gusta realmente es el acto de entender por que algo es bueno o malo y escribir las razones. Que no me guste no me obliga a escribir un análisis lleno de odio… Solo me obliga a comentar sus fallos.
yo como usuario es lo que hago, pero no sé si lo haría como redactor para otras personas, si que intentaría jugar a lo que quiero, y si es mi blog personal por supuestísimo, y lo que no me mola que le den por el culo.
Yo hago porque me gusten, me pasa igual que con los libros, es más, también me pasa que aunque no me esté gustando, o me esté resultando pesado, quiera terminarmelo aun así, por la historia o si no tiene, cosa bastante normal, por terminármelo y punto, porque la historia tela de veces ya me la sé.
Pero eso sí, como crítico creo que hay que tener cuidado de hacer como Homer Simpson, u Homero para los latinoamericanos, en sus dos vertientes, no todo te puede gustar, por mucho que juegues a lo que te guste, ni puedes hacer papilla todo lo que toques, en este caso pruebes, en el justo medio está la virtud y no por poner un título en plan, Análisis de X juego, y muy a vuestro estilo, sin notas ni nada unas cuantas imágenes de furullos, pos no lo veo chupapollas, o que tras el salto o justo antes una pregunta ¿te gusta esto? y poner una jartá de tías en tetacas y poner después, pues también te gustará esto, y poner la carátula del juego o capturas o todas.
Por cierto, con esto va un mensaje subliminal, que ya hace tiempo que no veo esos análisis por aquí y de vez en cuando animan y te descojonas a la par.
La verdad es que cada día que pasa me siento mas defraudado con los juegos actuales. Yo también pongo todo de mi parte y intento que la compra sea menos dolorosa,aunque venga de manos del Game. Insisto en que el juego tiene que ser bueno por cojones y me auto engaño. Pero que le vamos a hacer,el mal del jugón que se dice(que lo digo yo,vamos).
A mi pasa algo similar, los juegos que comento suelen ser juegos que me gustan, y cuando comento uno que no me gusta… me salen escritos ambigüos.
Precisamente por lo que comentas de lo que pasa entre bambalinas he rechazado más de una propuesta que me han hecho (todos los que me conoceis sabeis que yo solo acepto las indecentes, llenas de sexo desenfrenado, alcohol y películas de Bill Murray).
Criticos gilipollas que despotrican por despotricar intentando dar una imagen de sofisticado los hay a montones, pero críticos que sacan las partes negativas por que realmente les gusten los buenos juegos y les jode ver cosas mal hechas hay muy pocos.
Y lo de los juegos que tienes por jugar, haz como hago yo, guardalos para la jubilación xD
Magnífico texto, Andresito, y magnífica foto del primer Heroes abriendo el artículo.
Estoy de acuerdo en todo, yo también intento sacar lo mejor de un videojuego siempre, y me he llevado chascos hypeados enormes: Burnout Paradise, Sacred 2, Mass Effect…
Y es que habiendo juegos como Heroes 2, como nombras, Civilization Revolution, al que tengo abandonadísimo, Theme Hospital o el genial Puzzle Quest, osea, juegos con los que te pones a jugar y cuando miras el reloj han pasado 5 horas, es incomprensible que las compañías no intenten igualarlos y nos ofrezcan juegos aburridos, y que encima intenten vendernoslos como lo que no son.
Me encanta jugar :)
Por cierto, me ha enamorado captura del King’s Bounty!
Por otro lado, dado que juego a mi ritmo y esperando que los juegos me gusten, cuando un juego no me gusta la decepción es mayúscula, me siento traicionado y a veces resulta algo hasta traumático :D
¿A quién se le ocurrió poner lo de las latas de gasolina en L4D2? Mira que el primero no me entusiasmaba, pero el segundo es que LO ODIO.
No puedo evitar sentir empatía por tu posición, y es que sí, uno siempre quiere tener buenos juegos, pero para mala fortuna uno no se informa lo suficiente, o a veces simplemente y llanamente el juego no está hecho para él, que también pasa. O el juego es una reverenda mierda, pero es lo menos, siempre y cuando juegues bien tus cartas a la hora de comprar un juego nuevo.