Análisis: Donkey Kong Country Returns

Escrito por en Análisis - 15 enero, 2011

Ya es demasiado habitual que el sector duro de los aficionados a los videojuegos critique con dureza a Nintendo por cómo su consola de sobremesa se ha vuelto la favorita de niños, ancianos y amas de casa, por cómo ha transformado el sector alentando los videojuegos “casual” y por ensuciar las “consolas mayores” que han intentado apuntarse al carro con Move y Kinect. Sin embargo, de vez en cuando Nintendo se baja los pantalones, se saca la polla y nos demuestra que sigue siendo el que la tiene más larga y más gorda.

Entonces, a los que amamos los videojuegos no nos queda mas remedio que agacharnos y darle un besito en la punta, con respeto y admiración, pero sin mariconadas. Y la última vez que le hemos visto el rabo a Nintendo ha sido con el lanzamiento de Donkey Kong Country Returns.

«I’m back, madafocas!!»

Mientras que vemos como sagas consagradas son fulminadas gracias a pésimos remakes, injustificadas secuelas o spin-off’s diversos, Nintendo recupera casi del ostracismo al simio más famoso de los videojuegos. Lo recupera otra vez, puesto que el primer Donkey Kong Country, ese videojuego de Rare que apareció para el Cerebro de la Bestia (jovencitos: me refiero a la Super Nintendo) hace 15 años, ya recuperó al gorila de Nintendo, desaparecido de los videojuegos desde mediados de los 80. Y lo recupera a lo grande, con un título lleno de esa magia que tenían los juegos de 16 bits y que desgraciadamente es tan difícil de encontrar en los juegos actuales.

Donkey Kong Country (1.994)

Porque Donkey Kong Country Returns es mucho más videojuego que la mayoría de lanzamientos de este año, del año pasado y seguramente del año que viene. Un juego que rompe las barreras y es capaz de divertir a todo el mundo, tanto para quien lleva 20 años con un mando en las manos como para los que nacieron con una Playstation bajo el brazo, tanto para los que buscan que un juego les divierta un rato como para los que buscan retos para poner a prueba su pericia, tanto para los que pueden jugar media horita al día como para los que pasan horas delante de la consola, tanto para los que quieren jugar solos como los que quieren divertirse en compañía… Un juego en el que la frase “para todos los públicos” no significa que sea para niños y los sufridos padres que los acompañan.

Soberbio

Retro Studios son los que han tomado el relevo de Rare y, con todo el respeto y el cariño del mundo, nos han puesto delante lo que debería ser un Remake (o Re-Issue o lo que sea que se le quiera llamar a volver a hacer un juego antiguo de nuevo) de libro, manteniendo todo lo bueno y mejorando lo mejorable, sin necesidad de añadir chorradas inútiles o “adaptarlo a los gustos actuales” y desvirtuar la esencia del juego. Donkey Kong Country Returns nos demuestra que si algo era divertido hace 15 años, no tiene por qué no serlo ahora, que, como si de un buen vino se tratara, ha envejecido bien y esa fórmula no solo no ha perdido un ápice de diversión sino que ha mejorado con el tiempo.

Sublime

Es hora de desempolvar las Wii, esa consola de luces y sombras que muchos tenemos medio abandonada por culpa de la mediocridad habitual de sus lanzamientos, para devolver a Donkey Kong a su trono de Rey de la Selva de los Videojuegos, con el Mono Serio a su derecha y el Mono Mongolo a su izquierda. Y, la verdad, una vez he podido disfrutar de Donkey Kong Country Returns, tengo que reconocer que me gustaría verle la picha a Nintendo más a menudo.

Hitchcock Reloaded

U-N-I "Donkey Kong"