Impresiones: Catherine

Los japoneses llevaban tiempo esperando el día 27 de enero. A parte de ser el día después del cumpleaños de cierto hombre glorioso, es el día en el que Atlus nos permite atisbar un poco del juego más esperado por la sociedad nipona. Hablamos de Catherine, la nueva obra del diseñador artístico de los últimos títulos de Persona así como de los productores de la misma saga. En El Pixel Ilustre poco nos importan las barreras fronterizas así que después de pasarme la demo un par de veces, es hora de quitarle un poco de misterio a un título que muchos esperan, pero que pocos saben que esperar de él.

Desde que Catherine fue anunciado, mucho se ha hablado de este título. Ya sea por la gente que hay detrás de él (Shoji Meguro a cargo de la música es sinónimo de calité), por lo extraño que siempre ha parecido ser o, no vamos a engañarnos, por la sexualidad que destila este juego. Poco a poco, Atlus ha ido creando una bola de hype que se ha ido extendiendo por todo Japón y que ha salpicado fuera de sus fronteras. Catherine es uno de los títulos más esperados de este 2011 y esto se debe en gran medida a la gran campaña de marketing que ha realizado la compañía nipona. Yo mismo he caído bajo su influjo y he publicado algunas cosas sobre el juego. Ahora que le he dado un bocado, ¿tanto hype era desmesurado? Personalmente pienso que no, porque lo que nos ofrece la demo de Catherine es lo que ya conocíamos del juego.

He podido probar el inicio del modo principal del juego, el conocido como «Golden Theater» que es una especie de programa de televisión. Esto nos hace preguntarnos lo mismo que en Andriansang, ¿será todo el modo historia un episodio de este programa ficticio? Mientras Atlus no se pronuncie, solo podremos especular. Empezamos con un tutorial donde nos explican la mecánica de las fases conocidas como «Nightmare» que son las más “jugables” de todas. La mecánica es simple: tenemos que ascender en una torre de cubos en un tiempo determinado si no queremos morir. Podremos mover determinados cubos para ir abriéndonos camino hacia la cima pero hay que tener en cuenta que hay algunos que son inamovibles, así como hay unos cubos marrones que podremos desplazar de una forma más lenta haciéndonos perder segundos importantes de nuestro tiempo de vida. Por el camino también nos encontramos con otros objetos como almohadas que habrá que recoger, monedas para incrementar nuestro poder adquisitivo o cubos para poder colocar en el camino. Se que es una explicación recomendada para niños de 1 a 4 años pero quiero dejarle claro a la muchachada como es Catherine. Aunque todo esto parezca un tanto insulso, he de decir que es una forma de juego bastante rápida y que la cosa irá incrementando su dificultad a medida que vamos avanzando por el juego. Cabe decir que la demo solo permite jugar en modo fácil por lo que tampoco puedo hablar demasiado de su complejidad. Una vez llegemos arriba, nos dicen el tiempo que hemos tardado y nos darán una medalla dependiendo del tiempo que tardemos.

Tras el tutorial, Vincent, el protagonista, tiene una cita con su actual novia Katherine (nótese la K) en una secuencia de anime acompañada de un video realizado con el motor gráfico del juego. Se sabe que el título de Atlus tendrá multitud de secuencias anime grabadas por Studio 4°C que son los responsables de hacer lo mismo en otros juegos como Jeanne D’Arc o Rogue Galaxy entre otros. Poco podemos decir de esta escena ya que nuestros monos aún no han logrado aprender japones por muchos videos de Urotsukidoji que les hayamos enseñado. Si acaso alguno nos ha impuesto una demanda por daños psicológicos. A esta secuencia le sigue otra bastante diferente en el bar Stray Sheep donde nos encontramos con nuestros amigotes y en donde se desarrollará otra de las partes del juego conocida con el original nombre de «Stray Sheep». Aquí supuestamente tendremos que beber para facilitar nuestra labor en las pesadillas, pero en la demo poco podemos ver de esto. Solo más escenas en perfecto japones que por suerte ya han sido mostradas con anterioridad, por lo que más o menos sabía de que iba la trama. Después de soltarte un pegote en perfecto japones, tus amigos se largan y te quedas solo en el bar.

Aquí entra en acción el teléfono móvil del protagonista que seguramente tenga bastante relevancia en el sistema de juego, ya que al responder los bonicos e ilegibles kanjis que nuestra Katherine nos envía vía mensaje, una especie de barra de karma aparece por primera vez. Parece ser que nuestras elecciones harán mella en nuestras relaciones así como en la historia, pero creo que le contesté con cosas sexies e ilustres ya que el medidor subía hacia el lado positivo. También tenía otros mensajes que no tengo ni jodida idea de que son, pero no podía interactuar con ellos por los que tampoco creo que me haya perdido demasiado. Anuncios de bragas usadas o cosas japonesas del estilo seguramente. La escena termina con una atractiva chica que se acerca a nosotros y nos cuenta algo con su voz aniñada. Esta rubia es la amiga Catherine que da nombre al juego y que poco podremos ver en esta demo. Lo siguiente que vislumbramos tras un fundido en negro es otra fase del plataformas puzleado que es el pilar jugable del título. Esta vez tendremos que apresurarnos aún más porque debajo de nosotros hay un gigante engendro del mal que intentará hincarnos un tenedor inmenso si no somos lo suficientemente rápidos para llegar a lo más alto. A diferencia de la fase del tutorial, el juego aquí es más complicado y me han trinchado varias veces consiguiendo unas muertes bastante sangrientas. Como aliciente a la dificultad, mientras subimos la torre y cada cierto tiempo, el inmenso enemigo convertirá muchos cubos de nuestro camino en inamovibles o los volverá marrones para que tardemos más tiempo en desplazarlos. Tras superar las dificultades, y darme cuenta de que existen check points en el camino, llegamos a la cima donde se da por finiquitada esta demo y nos dejan con un video de escenas no mostradas aún donde observamos que también podremos movernos por el bar Stray Sheep y que incluso habrá una recreativa llamada Rapunzel a la que podremos jugar y que homenajea en cierta medida al mítico Q*Bert.

Francamente, Catherine es lo que esperaba tras leer la información vertida en la red. Tan solo he podido probar una escasa parte del juego pero yo me doy por satisfecho. Me gustan los juegos de puzzle y más si esta parte solo supone un trozo de lo que es Catherine. Sin duda alguna nos encontramos con un juego diferente a lo que estamos acostumbrados y esto siempre es una buena noticia. Lo único que me perturba es que no se como va a funcionar este título fuera de Japón. Catherine es un juego muy, MUY japonés. Esas largas escenas de video pueden cansar a los occidentales (excepto si se trata de un Metal Gear), así como multitud de conversaciones propias de los videojuegos de citas típicos japoneses y que jamás han llegado a salir de la isla. Rezo para que este juego llegue al menos a Estados Unidos porque realmente veo muy complicado que Catherine sea lanzado en Europa. Ojala me equivoque porque pienso que Catherine puede llegar a ser una de las mayores sorpresas de este 2011. No me baso simplemente en la demo que acabo de probar si no en todo el afluente de información que ya está instalado y acomodado en mi cerebro. Puede que sea porque estoy un poco cansado de los típicos videojuegos que atiborran la lista de lanzamientos de la actual generación, pero creo que un título como Catherine es necesario para darle aire fresco a unas consolas repletas de secuelas insulsas y títulos excesivamente semejantes entre sí. In Catherine we trust!