Qué pesados están los guionistas con los impulsos electromagnéticos, ¿no? Modern Warfare, Bad Company, Splinter Cell: Conviction… Podríamos decir que las bombas PEM son los nuevos zombis, y es que hasta un reputado escritor como John Milius (Apocalypse Now, Amanecer Rojo, Roma) ha caído en este recurso. En Homefront, por suerte, no forma parte de la campaña en sí, aunque se utiliza para ponernos en situación: en el 2027, los Estados Unidos han sido conquistados por una Corea unificada. Con los ejércitos dispersos, la única resistencia está formada por civiles y antiguos soldados que unen fuerzas para intentar echar a los invasores.
El argumento nos pone en la piel de Jacobs, un ex piloto de la Marina al que los coreanos capturan para llevárselo a uno de sus campos de trabajo. En el trayecto las cosas se tuercen para los captores y nuestro protagonista es rescatado por miembros de la resistencia, quienes requerirán de sus servicios en un futuro muy próximo. A partir de ese momento, el desarrollo podría ser todo lo previsible que se presupone en este tipo de videojuegos (estamos hablando de un FPS, y sí, últimamente he jugado a un montón de ellos), pero lo cierto es que tanto la ambientación como el hecho de que no vayamos a vivir el típico combate definitorio y definitivo al que ya nos han acostumbrado hacen que el interés no decaiga prácticamente en ningún momento. Además, en mi barrio dos de cada tres locales ya son tiendas de alimentación o de todo a un euro, así que la inmersión es doble en mi caso. Los chinos nos comen, ¿eh?, nos comen los chinos.
Como decía, el entorno está muy bien conseguido en Homefront. Las calles están desoladas, destruidas, llenas de cadáveres tirados en las aceras, y la gente se ve sometida por soldados que no se cortan a la hora de hacer valer su poder sobre las personas que consideran oportunas. Tampoco se queda atrás el Oasis, un lugar oculto a ojos del enemigo que la resistencia protege y donde viven todos los ciudadanos que no quieren doblegarse ante Kim Jong-un, el líder coreano. La lucha por la libertad de estos combatientes da lugar a una variedad de situaciones que me han sorprendido para bien. Lógicamente no voy a desvelaros nada, pero los momentos de tensión que plantea este juego están mucho mejor llevados que los de la mayoría de shooters que hay a la venta, y son unos cuantos. Lástima que la duración sea tan, tan escasa (unas cinco horas, diría yo) y que todo esté tan sumamente scriptado (hay momentos en los que no podremos ni subir una escalera hasta que lo hagan todos los que nos acompañen).
Obviamente, hay un motivo que justifica esa “dejadez” en la campaña, y es el multijugador. Kaos Studios se ha encargado del juego completo, algo que se agradece a la hora de pasar de un modo a otro: los controles son similares, la sensación que transmiten es la misma, la contundencia de las armas también se mantiene… Lo cierto es que, en general, es muy Call of Duty (eterna comparación), pero tiene detalles realmente buenos que lo convierten en algo excepcional que me ha robado –y seguirá robándome- muchas horas de vicio.
Mencionaba CoD porque el estilo de juego que permite Homefront es bastante variado y va desde las frenéticas partidas en las que todo el mundo corre como pollos descabezados hasta las típicas en las que los dos bandos intentan organizarse y se trabaja por pequeños grupos (rollo Battlefield). Yo, que soy bastante culo inquieto, me veo capaz de echar partidas en equipo a ratos, pero la mayor parte de las veces salgo escopetado por el mapa en busca de enemigos y no pienso demasiado en mi estrategia; lo mejor es que funciona en ambos casos.
El título siempre apuesta por el juego en grupo y no da opción al típico “todos contra todos”, pero aunque peca por escasez, sus modos dan bastante de sí al incluir una serie de novedades que hacen de cada partida un nuevo desafío. Tenemos Control de Tierra (lo que viene a ser Dominación) y el Combate a Muerte por Equipos de toda la vida, y de ellos deriva el modo Comandante de Tierra, que utiliza la base de ambos y añade una serie de objetivos individuales. Imaginad, por ejemplo, que estamos en Control de Tierra y hemos de capturar las zonas A y B. Durante la partida, nuestro comandante nos asigna un objetivo secundario como matar a un soldado del equipo contrario que está haciendo una racha de muertes. Al hacerlo conseguiremos puntos extra para subir de rango, pero si ese soldado somos nosotros se nos asignarán estrellas por sobrevivir y continuar con la racha. Que nos den una estrella supone obtener mejoras instantáneas como mayor velocidad o resistencia a los disparos, pero el número de oponentes que nos tendrá en el punto de mira aumentará junto a nuestro nivel de amenaza.
Estas habilidades provisionales se añadirán a las que hayamos definido en nuestro perfil, que funciona como en casi todos los juegos orientados al online que existen hoy día. Además de una variedad considerable de armas, tenemos a nuestra disposición “drones”, que son pequeños robots por control remoto que podemos manejar a través del campo de batalla y que hacen cosas tan graciosas como disparar ametralladoras, misiles o marcar a los jugadores del equipo contrario para que nuestros compañeros sepan sus posiciones. También tenemos disponibles vehículos tales como humvees, tanques o helicópteros que se solicitan durante la partida y que, debido a un sistema de puntos muy bien balanceado, no desnivelan para nada el modo multijugador.
Los puntos de batalla, como se llama este sistema, son nuestra moneda de cambio en el desarrollo de un combate. Cuando matamos enemigos, dominamos zonas o superamos desafíos como rachas de bajas con un arma específica, ganar una ronda, etc., conseguimos puntos que pueden ser canjeados al momento por un par de ayudas que habremos determinado previamente al crear nuestras clases. Estas compras pueden pasar por un RPG, un “dron” o un ataque aéreo. Otra manera de invertirlos es la de solicitar un vehículo justo antes de aparecer en el terreno cuando nos han eliminado. En ocasiones, si uno de los bandos se ha dedicado a jugar bien en equipo, podemos encontrarnos con la alarmante situación de tener frente a nosotros dos tanques y un helicóptero con muy mala hostia que harán bastante pupa en el marcador, pero saber luchar en conjunto es lo que determina que esa situación se mantenga durante mucho o poco tiempo.
El conjunto funciona de maravilla gracias a un apartado técnico muy correcto. El Unreal Engine 3 ya huele a kilómetros, y es cierto que en el multijugador veremos a menudo texturas que cargan demasiado tarde o zonas que parpadean de repente, pero no es nada que nos pueda quitar el sueño. El sonido no está mal y las armas dan el pego, pero aún hoy me pregunto a quién se le pudo ocurrir poner un sonido bastante parecido a los de unos petardos cuando recibimos disparos. Por suerte la banda sonora, que personalmente me parece muy inspirada (y tiene algún tema pegadizo, buena señal), hace que nos olvidemos de ese aire a tiroteo de feria realmente pronto.
En definitiva, Homefront ha sido toda una sorpresa para mí, que lo tenía como otro first person shooter clónico y del montón (lo esperaba más flojete que Medal of Honor, la verdad). No quitaré razón a todo aquel que esté cansado de ver florecer este tipo de juegos una y otra vez en las estanterías de las tiendas, pero quien disfrute pegando tiros en red y quiera probar una campaña algo más original de la cuenta –aunque dure un suspiro– debería dar una oportunidad al título de Kaos. Es una lástima que THQ haya cerrado su estudio creador antes de que viésemos crecer la saga, porque prometía bastante.
Pues… te van a regañar dando tanto 8 a casporro, de todos modos se sigue la filosofía de «los demás no lo quieren notros lo amamos», porque Homefront a sido atacado de una forma cruel.
Sinceramente suena bastante bien este titulo, pero yo ya empiezo a pasar de los FPS, ayer por ejemplo pasé machinarium, ando con Maze of Galious, termine igual VVVVVV, y ando jugando a la ves Bit trip Runner y Super Mario Bros X., supongo que es la cosquilla de buscar algo distinto.
Vaya truñaco de juego y le das un 8..
JUAS!!
@handlolo: me juego tu brazo a que has mirado la nota y no has leído el texto, carapán.
Me alegra ver un análisis del juego que parece que está sin contaminar por los prejuicios con los que todo dios parece haberse aproximado a este título. Eso si, sigo sin verle el parecido con un COD ni en la sombra de ojos. Es mucho más parecido a Metro 2033 que a cualquier otra cosa.
Tras jugar media campaña, diría que es un MEH enorme. (Por no decir que un truño como una casa.) Se hace muy tediosa, y el abuso de momentos «de los de mirar y esperar» hace que no te dé ninguna gana de jugarla una segunda vez.
Eso sí, no he probado el multijugador, que es en lo que se han centrado los desarrolladores (y esta reseña). Qué pena que a mí ese tipo de juego ni me va ni me viene.
Gracias Pablo Pein por que esto era el empujón que necesitaba para lanzarme a jugarlo.
Ya dejara mis impresiones por aquí cuando lo acabe.
Estaba deseándome pillarlo y estoy igual que @gorgonero.
Pero lo dejare para cuando vengan rebajas.
@Jlink: nah, tampoco es para tanto xD. Además, creo que el juego lo merece, que se ha llevado bastantes palos gratuitos.
@cirene: yo no diría que se parece a Metro 2033. Ese juego es bastante especial por decirlo de alguna manera, más cercano a un survival que a Homefront. En cuanto te pones a disparar, correr, ese cuchillo… Es evidente que la referencia (y la saga a la que querían plantar cara) es CoD, aunque la historia no tenga nada que ver.
Yo pensaba que el juego era más regulero, pero no creo que le eché un ojo, no tengo tiempo entre tanto rol que tengo por jugar
@PabloPein
Pues tenemos apreciaciones diferentes entonces. No digo que se parezca a Metro, solo que si tuviera que parecerse a algún juego sería a ése. La cadencia narrativa, los recursos de que se sirven ambos títulos para meterte de lleno cada uno en su particular ambientación, la manera de llevarte a remolque en esa especie de descenso hacia lo desconocido.. y ese control tosco y pesado, son factores que que me hicieron establecer un cierto paralelismo entre ambos títulos.
COD tiene un aire totalmente diferente, más ligero, mas insustancial. Ese ritmo narrativo acelerado, como de videoclip, ese control a lo cámara flotante y esa carencia absoluta de peso emocional en sus pueriles argumentos no tiene nada que ver con la experiencia que Homefront ofrece.
@cirene: en eso te doy toda la razón, y veo a qué te refieres cuando lo equiparas a Metro. Sin embargo, el control tosco y pesado no lo noto igual que tú, sino que lo veo bastante bien ajustado, y de ahí mi referencia a Modern Warfare. En lo demás no hay comparación posible. ;)
@PlaboPein
Ok, tan solo puntualizar que con control pesado y tosco no estoy hablando negativamente de él, de hecho me encanta el control del juego :)
Un saludo y enhorabuena por el análisis, como digo me agrada mucho que se le reconozca su valía a un juego a mi parecer excesivamente maltratado.
A mí me gusta el control tosco de Metro 2033, pero el de Homefront me parece una patada en los bajos. No sé, llámelo «X».
@PabloPein Pues si, eso no te lo discuto, aunque nunca he podido comprender porque la «critica especializada» actúa de esa forma tan despreciable, solo recuerdo una revista que tenia un pensamiento critico bastante bueno, pero en general, se dedican a enaltecer a títulos que no lo merecen tanto y a despreciar a otros mas desconocidos (me paso con Zelda TP, que siento que muchos lo analizaron a nivel franquicia y jugando solo unas horas, porque la mayoría le cascaron un 10 cuando tenia algunas fallas, principalmente en la ultima mitad del juego)
La campaña es una maravilla, no hay nada mas que añadir.
El multiplayer es un desastre.
Escenarios pequeños, lag incluso en los servidores dedicados. Correciones constantes de la posicion de los enemigos con ‘respaneos’ en tu cara que permiten a tus rivales machacarte a balazos nada mas aparecer. Baja resolución en el render del multiplayer – ni siquiera esta a 720p …- caidas de redimiento cuando hay batallas con abundancia de explosiones. Campers a tutilplen – gracias a la posición tumbada. Y un daño de las armas brutal que hace que incluso con el chaleco puesto no puedas practicamente ni moverte por el escenario.
Para mi un triste intento de copiar el estilo de juego de Battlefield 2 – no del Bad Company – copiando descaradamente al CoD.
La sensacion general es de que estamos jugando a un juego de hace unos cinco años – y con suerte -, con un motor grafico desfasados y que pide una actualizacion a gritos.
Si este juego se vendiese por 10€ y fuese de serie barata tendria un pase pero como AAA no tiene por donde cojerlo. Hay alternativas mucho mejores.
A mí me parece bastante cacota la verdad. La campaña me parece horrible y el vivo retrato de la cutrez del estilo Duty calls; coge todo lo malo de los juegos modernos del género: scripts a patadas, ia escasilla, pesadas secuencias encubiertas que hay que tragar por huevos siempre… y se olvida de lo bueno, que sería una alta intensidad de juego. Esperaba que buscase su entidad propia y podeis imaginar lo que pasa a los 10 segundos de juego: secuencia de golpe en la cara. No hay cod ni juego moderno que se precie que no tenga dos o tres en su campaña. Debe como en las pelis de terror adolescente que te tiran cosas a la pantalla, pa aprovechar el 3D.
Así a ojo diría que el 80% del juego te lo pasas siguiendo al colega malote por donde te diga como si fuese tu primo mayor que te lleva de putas mientras matas sicarios, mu soso y aburrido todo. Aparte de la misión en vehículo, no podía faltar la tipo «autoescuela» como gusto de llamarlas, esas en las que vas punto por punto según te señalen y pasan cosas chulas a tu alrededor en las que no puedes interferir mientras te van diciendo: a la de tres mata al de la derecha, agacha que pasa un camión, cuando te diga corre, estacione cuando pueda, etc. Solo salvo la misión final y algo de la sexta. (El muro infernal, era cutre pero al menos no tanto como Mójate en cuatro).
Y todo esto en menos de seis horas, pa que molestarse en hacer más si lo que piden es online y los Llamada del deber a duras penas llegan a las ocho (que me parece escaso también). Una vergüenza de duración, así está la historia con poco desarrollo y personajes planos como Anastasia Mayo en sus comienzos. La ambientación es chula y luce en ciertos momentos pero me parece muy desaprovechado todo, hasta me atrevería a decir que los Biuty col tienen mejor historia. Si hasta el final es un coitus interruptus de aupa.
Le doy tanta caña por el single porque es lo que más le interesa a un servidor, sigo viendo el online como algo para complementar (salvo aquellos pensados ex profeso como los Battle viejos o Unreal tournament). El hecho de invocar coches in situ, comprar armas y los modos de perseguir amenazas y el mejor de tres rondas le dan un toque especial. Me parece mejor que el cod de siempre pero sigue siendo muy parecido a fin de cuentas con tanto perk, bombardeo y experencia. No creo que acumule ni veinte horas pero esto ya es más personal, no me acaba de llenar el estilo del fps moderno
ola necesito ayuda me podrian decir si el homefront va a traer coperativo y si sera offline y tamnbn denme nombres de juegos nuevos ke tengan cooperativo en campaña offline osea sin xbox live porfa
DIS IS DA NU EPI
hola!!! alguien me podria ayudar explicandome como puedo jugar el HomeFront por LAN!!! e intentado crear la partida pero los ke se van a unir no ve la partida!!! ke podria ser eso???