Los más esperados de 2012 (Bruno)

Escrito por en Artículos - 11 enero, 2012

 

¿Qué, una cabecera bonita? ¿Poética? ¿Demasiado simple? ¿Estúpida? Pues a mi me entran ganas de llorar. Mis previsiones para 2012 son esas: sencillamente nada, no espero ningún juego porque no voy a comprar prácticamente ninguno. Estamos en crisis y a mi ha hecho un doble hit combo: soy un estudiante que está acabando una carrera sin presente ni futuro, que gana cuatro perras gordas al mes como becario, que hasta hace nada necesitaba dos trabajos para sobrevivir y que ahora lo hace con lo que le pasan sus padres todo los meses. ¿Qué bien, eh?

Resulta que soy becario en un sitio que no voy a nombrar y que en la revista en la que colaboro no saco gran cosa. Aunque este año acabo la carrera, Periodismo, dudo que encuentre trabajo remunerado lo suficientemente bien para vivir cómodamente en Madrid, es decir, 1.000 euros. Por eso mis expectativas para este año son nulas. Quizá Mass Effect 3 sea lo único que me compre antes de verano. Con algo de suerte, me toca alguno de los pocos juegos que llegan a esta casa. Por eso nuestras crítica suelen merecer la pena, han costado dinero. Pensad en ello: en la Meri y demás sitios todos los juegos salen gratis, normal que se lleven nueves. A caballo regalado…

En cualquier caso, que me pierdo, al mal tiempo buena cara. El año pasado compré bastantes juegos de estos chiquititos que te salen casi gratis. No lo pensaba demasiado, porque iba «algo» mejor de dinero (tenía dos trabajos, vaya) y sin pensarlo demasiado (si lo hubiera pensado, no los habría comprado, qué cojones) he empezado este 2012 con un montón de juegos que no he jugado.

Creo que me he equivocado de «Binding of Isaac»

Uno de los juegos de 2011 que debo exprimir a tope es The Binding of Isaac. Maldita sea, qué cosa más pequeñita y más adictiva. Aún no me lo he pasado y le he echado no buenas pocas horas. Rezuma amor por todos sus poros y pica que no veas. Yo soy de esos que se enfada cuando juega y en cuanto me matan lo dejo. Eso sí, lo retomo a las pocas horas como si no hubiera mañana. Es algo muy positivo a decir de cualquier videojuego.

Otro de 2011 que no he jugado: Gemini Rue. Yo no soy de aventuras gráficas ni de «point and click», pero me han dicho que esta maravilla es eso: maravillosa. Quizá sea la única manera de meterme en el género y quizá probar esas joyas que tanto se alaban en los foros pero que en realidad ni Dios a ha jugado. Otro: Orcs Must Die. Me he enterado de que no tiene multijugador y eso me ha hundido un poco, pero hay que jugarlo igualmente, que los tower defense son aburridos de cojones pero este me ha conseguido picar.

El caso es que ninguno de estos tres juegos me ha costado en total más de 10 euros. Es para pensárselo. Hay más juegos, también chiquititos, pero el juego al que probablemente más tiempo le dedique en 2012 será uno que os ha robado las navidades a todos: Skyrim.

Mi estado anímico

Como mi ordenador estaba muerto cuando salió el juego y luego estuve de exámenes, digamos que he empezado antes de ayer a jugarlo. Está bien pese a ser una mierda en mucha cosas, pero al menos es largo y amplio y podré jugármelo en tres o cuatro estilos diferentes: siendo un borrico, siendo un mago, siendo un pícaro y siendo un bocazas. A ver qué tal. Esto es un poco la vuelta a la infancia, cuando tenía cuatro juegos y me los pasaba una y otra y otra vez. Con Skyrim me va a pasar eso, igual que con Deus Ex Human Revolution, Dark Souls, The Witcher 2 y otros tantos juegos de este años a los que siento que no les he dedicado el tiempo justo.

Quizá vosotros os deberíais plantear lo mismo: ¿habéis dedicado tiempo suficiente a ese juego que ha costado 30/40/50 euros? Yo no y voy a enmendar ese error. Ya os puedo asegurar que, aunque no mejore mi situación económica, voy a jugar igual que siempre. Ah, y sin piratear nada, que uno tiene orgullo. Orgullo y consolas antiguas a las que quitarles el polvo.

Bueno, qué, ya os he deprimido, ¿no? ¿Con qué cara vais a insultarme ahora en los comentarios? Pobrecitos míos…

Ser aficionado a los Call of Duty sale caro

Nos gusta la mierda