Final Fantasy VII comienza con una escena de vídeo en la que nos presenta una ciudad, Midgar, dividida en sectores muy bien diferenciados y con un enorme edificio de aspecto futurista en el centro. Acto seguido, casi sin darnos tiempo de elegir un nombre para nuestro protagonista, Barret comienza a darnos la chapa sobre la fisionomía de la ciudad, el grupo terrorista bondadoso en el que estáis alistados, y la malvada corporación —Shinra— propietaria del edificio que vimos al principio y de la única fuente de energía capaz de abastecer la ciudad. Con esta información en el saco comenzamos a poner bombas en plantas de energía, a recordar la infancia de Cloud (como para no hacerlo con las tetas de Tifa), a enfrentarnos a enemigos poderosos de Shinra, a comprar y vender productos cual mercachifle de barrio, a travestirnos… Así, hasta que pasadas unas cuatro o cinco horas (dependiendo de la prisa que nos estemos dando) decidimos que la mejor idea es dejarse de bombas en reactores e ir directos al edificio de Shinra para liarse a hostias con todo el mundo y que sea lo que dios quiera.
Y así lo hacemos. Cloud, Barret y Tifa se plantan en el majestuoso edificio de la introducción del juego, entran por la puerta principal (o te aburres como una ostra por las escaleras de emergencia) y, tras unas vainas muy locas, le pegan una paliza al nuevo presidente de Shinra y escapan a toda hostia por la autovía minijuego mediante. Han pasado unas seis horas desde que comenzó la partida, tiempo más que suficiente para terminar montones de videojuegos de otros géneros, y entonces y solo entonces, cuando sales por primera vez de Midgar y apareces en el mapa del mundo, te das cuenta de que la partida no ha hecho más que empezar. De repente, el universo de juego que hasta ese momento era la ciudad dominada por Shinra, se expande hasta el absurdo al descubrir que no hemos visto ni una vigésima parte del mundo que Final Fantasy VII tiene que ofrecer.
En ese momento, en ese preciso instante en el que ves a un enorme y cabezón Cloud de pie sobre la superficie del mapa del mundo te das cuenta de lo tristes que son las hazañas que has logrado hasta ese momento, del poco camino que llevas recorrido en realidad, de la cantidad de lugares por visitar que tienes por delante y, en definitiva, de que la aventura que imaginabas llevar relativamente avanzada no ha hecho más que empezar. Y es maravilloso. Nunca sentirse tan insignificante había resultado tan satisfactorio.
Las claves de esta sensación tan impactante son fundamentalmente dos: una intrínseca al juego y otra derivada directamente del momento en el que salió a la venta. La primera es muy sencilla de explicar, y es que hasta ese preciso instante no somos conscientes de la relativa libertad que tenemos entre manos. Así que claro, salimos de Midgar y lo que parecía un juego totalmente lineal, de repente planta un mundo abierto colosal bajo nuestros pies, dejándonos con la boca muy abierta. La segunda razón, sin embargo, depende bastante más de la situación de cada uno. Para un buen número de jugadores de Final Fantasy VII (entre los que me incluyo), este no solo fue el primer título de la franquicia, sino el primer JRPG de esta magnitud que caía en nuestras manos. Esto es especialmente posible si, como en mi caso, además lo estabas jugando en PC, donde el JRPG era un género prácticamente inexistente hasta ese momento. Por este motivo sencillamente no esperábamos algo así. Seguramente los que ya habían jugado a los anteriores Final Fantasy no se llevarían sorpresa alguna, pero los que no lo habíamos hecho nunca estábamos alucinando pepinillos.
Efectivamente, mi primer momento ilustre (que no el único), aquel que recordaré siempre como uno de los mejores que he podido disfrutar en un ordenador, se debe en buena parte a mi propio desconocimiento sobre el juego en cuestión. No quiere decir esto, no obstante, que cada una de las ocho veces (sí ocho) que he terminado Final Fantasy VII no haya vuelto a sentir ese hormigueo en el estomago al salir de Midgar y ver el mapa del mundo. Es como si mis entrañas, ya sabiendo lo que me espera, se preparasen para hacer un viaje que se saben de memoria… pero les encanta hacer.
Totally agree. A mí me pasó exactamente lo mismo.
Yo he jugado a los FF, pero reconozco el momento descrito, ese en el que en pleno gozo te das cuenta que tienes mucho gozo por delante todavía, muchisimo.
Por esos juegos no me importa pagar.
:__)
Qué recuerdos, joder. Momentazo granderrimo.
Hasta a mí me impresionó salir al mapa del mundo en FFVII
Si, si mucha impresion y mucho mapa, pero luego no era mas que unos puntitos determinados a los que podias acceder.
Es como ponerle 1 fanega de tierra a un conejo para que se resguarde, pero solo hay 4 madrigueras en toda la extension de terreno.
La primera vez que lo jugue, me paso igual. Creía que tendría que ir reventando reactor a reactor y que el juego se desarrollaría en Midgar. Pero tras ver la persecución y que salias de la ciudad, no me lo podía creer. Gran momento, si señor.
¿Se podía salir de Midgar?
Yo es que lo encontré algo infumable.
Muy buen texto Andresito, has logrado hacerme recordar esa sensación… Igual rejuego el FFVII por tu culpa… pero, por favor…. ¿Vigésima parte? ¿Números ordinales para expresar fracciones? Muy mal.
Buen texto.
Ese momento de salir al mapa del mundo en Final Fantasy VII no fue solo impresionante para los iniciados en los JRPG, yo llevaba unos cuantos a mis espaldas y ninguno me pareció tan inmeso al salir de la primera ciudad.
Esto es sobretodo por que en ningún otro juego empieza ne una ciudad tan tocha y con tantas cosas que hacer, como bien has dicho llevas 6 horas de juego en las que pasa de todo y experimientas un montón de emociones y el juego acaba de empezar como quien dice…
Yo también creía que todo el juego se desarrollaba en la ciudad de Midgar y, ¡pluf! 7 u 8 horas después se me cayeron los testículos al suelo cuando descubrí el mapamundi.
Hoy día, con la malsana costumbre que tienen los medios sobre videojuegos en internet de destripar ABSOLUTAMENTE TODO creo que es imposible ni tan siquiera acercarse a igualar semejante sensación de maravilla y claustrofobia.
perdón, agorafobia, no claustrofobia.
@Luis Adonay: http://lema.rae.es/drae/?val=vig%C3%A9simo =/
PD: hoy en día más de un «analista» de videojuegos se marcaría el análisis diciendo que Final Fantasy VII está muy bien pero que pierde la esencia de la saga porque no te deja salir a un mapa del mundo y se desarrolla en una sola ciudad. LOL
Sí señor. A mí me encantó precisamente ese momento. Aunque JRPGs before FF7, al empezar a jugar este, no me esperaba otro mapa abierto así, ya que todo era tan lineal…
Usted HODIA FF VII.
Y yo le aplaudo!
Senti eso mismo… pero con el ocarina
Gran momento pero a mi el que realmente me dejo KO es cuando de repente en una carambola de acontecimientos consigues Viento Fuerte. Una puta nave voladora super osom libertad total.
Sí señor, momentazo. Y poco después te cruzas con la serpiente que piensas que estás a años luz de poder matar, lo que sigue aumentando esa sensación de que queda un inmenso camino por recorrer.
Buen trolling try. A ver si fermenta.
Aish, ojalá hubiese podido conseguirlo en mi infancia :'(
@Andresito
Touché…
@Luis_Adonay: pero me has hecho dudar y por un momento me he sentido fatal. =(
Luis_Adonay, te estás volviendo una putilla de las correcciones é xDD.
Sobre el Momento Ilustre, pues decir que estoy más que de acuerdo con mi hermano Andresito.
Yo ahora admito que Final Fantasy VII es un poco MEH, pero seamos sinceros y pensemos en la primera vez que jugamos al título. Fue una puta pasada, para mi casi cada cosa del juego es un momento para recordar pero lo que dice Andresito me dejó con el culo roto al tratarse del primer RPG que jugaba en mi vida.
Gran texto.
Yo, cuando salí al mapa del mundo en FF VII casi lloro de la emoción cuando comprobé que podías moverte sin que cada 5 segundos aparecieran enemigos aleatorios.
Por cierto que, después de no sé cuántas horas de juego, después de matar al enemigo final, resulta que no había entendido ABSOLUTAMENTE nada del juego. No sé por qué maté tantos monstruos ni por qué me querían matar a mí, no sé quién es Jénova ni Sefirot, no sé quienes eran esos bichos con farol que te apuñalaban. ¿Y dónde estaba esa fiesta que me estaba esperando en el piso de arriba?
Lo mismo me pasa con los juegos de Tom Clancy.
Es cierto que el juego tiene una variedad de situaciones en las primeras horas que te dejan loco. Luego se normaliza y esos momentos se espacian. Pero esos cambios de mecánica eran magníficos.
Lo de la libertad no me impresionó tanto porque ya había jugado a otros juegos de este tipo, pero como dicen por ahí, conseguir a Vientofuerte y a volar, fue la polla.
No entiendo eso de que el juego es tan Meh, yo lo recuerdo como una mezcla curiosa, y eso de que ibas a cuatro puntos concretos… Anda que no habia pueblos, cuevas secretas y demás…
8 veces??? Joder, yo con mi primera partida de 115 horas (el máximo dedicado a un juego hasta Fallout 3), y una segunda de pachangueo, tuve bastante, que hay mas juegos…
totalmente de acuerdo con esa sensación que ha descrito Mr. Andresito. aunque creo que gran parte de la «culpa» la tenía la manera en la que el juego te iba preparando para esa situación:
una pieza musical un poco más pausada (o reflexiva) después de la tralla que te acabas de meter, y un escenario bastante evocador (no era una autopista que terminaba abruptamente?)
escenario:
http://www.pioneerproject.net/public/weblog/aug-11/captivated-by-ff7-1.jpg
música:
http://www.vgmusic.com/music/console/sony/ps1/omoi.mid
sólo quería reunir el material para tenerlo fresco en la memoria..
Ains, ¿Veis como pesa (un huevo) el contexto?
Es algo que ya hemos hablado alguna vez: Cuando Andresito raja del Metal Gear Solid siempre le digo que si lo pilla recién salido, cuando era un púber, hoy todavía se le pondría muy dura. Me juego un pie y no tengo miedo de quedarme cojo :p
Que nadie se equivoque. No pretendo insinuar que FFVII es mal juego, sobrevalorado, que hoy día blablabla; que me conozco a los FFfanboys. Me parece una joya en lo suyo y atemporal artísticamente.
Si es que joder, sales de shinra que es una dungeon cojonuda (aburrida para algunos y lo entiendo, pero su diseño es maravilloso), luego el minijuego de la moto con su musiquita tan maja, a continuación esa escena con la autopista rota y amaneciendo y ENTONCES te das cuenta que la cosa acaba de empezar, joder, eso es muy grande.
Aunque al día de hoy me cuesta un mundo jugar otro jrpg (soy bastante feliz con los recuerdos del Sky of Arcadia en DC :] ), pues me han hecho tener ganas de darle la oportunidad a un FF. Buen artículo by the way; Es el tipo de elementos que traen los juegos que merece ser recordados.
Corrección: Skies* of Arcadia…vaya error mas feo para recordar un juego tan bueno -_-.
Sip, totalmente de acuerdo. Siempre que he hablado con alguien de FFVII ha salido esa sensación, ese momento a relucir.
Ese, junto con la escena que transcurre en la cabeza de Cloud.
Pero claro… soy un poco fanboy de FFVII, como todos…
(por cierto, cada vez que recuerdo los controles de pc, con el pad numérico, tengo pesadillas)
Genial, me quedé con cara de tonto.
Lo que mencionáis por arriba de la serpiente, a mi me ocurrió una cosa muy curiosa:
Logre cruzar (No sin múltiples intentos) sin que la serpiente me alcanzara. Y no hablo de estar montado en el chocobo no, hablo de ese mismo instante cuando no podías hacer nada contra ella, nada mas empezar el mapamundi.
bueno, pues yo soy de los haters de todo lo que lleve FF, y es principalmente grácias al VII.
lo jugué por lo espectacular de las invocaciones. las cuales HAMAS las primeras 15 veces que las ves, pero luego las sufres en silencio (o no tan en silencio) impotente sin poderlas saltar.
hice TRILLONES de veces las putas carreras de chócobos intentando conseguir el mejor ejemplar posible para cruzarlo y que saliera el puto chócobo dorado (realmente existe?) y al no conseguirlo y no poder acceder a la magia de los 12 caballeros (o como se llamase, que como digo no la conseguí) se me hizo imposible vencer al puto monstruo final y sus infinitas regeneraciones (y eso que aquí ya hacía ‘trampas’ con el duplicador de objetos).
en éste juego aprendí a amar a mi pad de capcom con función de autofire para pasar rápido los putos diálogos para mongólicos de los que consta el juego (eso sí, me partía el ojete con lo gayers que eran algunos personajes (el león principalmente…)).
sinceramente pienso que las horas pasadas con los 3 discos en mi PSX han sido la peor inversión de tiempo de mi vida. al mismo nivel que los 56 minutos que aguanté del metal gear (creo que era el 3) de PS2.
resumiendo: juego con escenas CGI espectaculares, un guión vacío y soso que me provocó un aburrimiento espantoso.
desde entonces no toco los juegos de square ni con un palo (bueno, miento, al VIII le dediqué un ratico (el primer disco) pero fué por el puto vídeo del baile que corrió antes del lanzamiento y que era una delícia).
@xaviwan
¿Con qué edad jugaste al FFVII?
pues ahora mismo lo desconozco… :@ soy del 75, y hablo ‘de memoria’.
creo que el FFVII lo jugué casi al año de salir en PAL, movido por el hype de los anuncios de las anteriores navidades, las revistas ‘imparciales’ (JAJAJA) y un par de amigos frikis que se lo habían jugado en japo (sin tener ni zorra del idioma), en inglés y en castellano y que durante unos cuantos meses me taladraron con las bondades de este título.
supongo que a lo ‘MEH’ que me pareció el juego le juntas todo el hype acumulado, los combates aleatorios constantes, las putas carreras de chocobos y los diálogos monguers y ya tenemos el porqué de mi odio a la saga.
Para eso prefiero el momento libertad del zelda OTT, mucho más real. O sea, cuando tras estar encerrado en la mini aldea con su bosque repetitivo y rise y su mazmorra derrepente se te abre la basta pradera de hyrule (que realmente es un poco trampa , ya que al ir a pata y ser eso, una enorme pradera, pues no es tan basto como parece) donde aqui ni mapamundis ni ostias, miras al horizonte y puedes ver un castillazo, una construcción que resulta ser un rancho, un volcan enorme, un lago , un desierto y varios sitios más, y a los que puedes ir, a pata claro, desde ese momento (al menos a la mayoría o a buen trozo de ellos).
Vamos, que me paece más real la sensación en este juego.
Yo añadiría una cosa respecto a lo que haces en Midgar… Vestirte de tía y seducir al dueño de un puticlub. Lo más tronchante que he visto en videojuego alguno en décadas :3.
Un saludo.
a mi me paso todo lo contrario debido a que ya había jugado el VI (para mi el mejor) y el IX (el segundo mejor) (en estos nunca te demoras tanto en salir al mundo exterior) y cuando ya llevaba esas 6 horas promedio en midgar me comenze a preguntar «¿cuando sera la puta hora salir al mapamundi?» y comenze a aburrirme y desesperarme (incluso llegue a pensar que en este no habia mapamundi) por que hasta ese justo momento la historia me habia parecido muy aburrida y lineal. Cuando por fin despues de 5 o 6 horas de juego sin conocer otro lugar mas que midgar sali al mapamundi me tranquilize y note que la historia comenzo a tomar forma. No es mi FF favorito pero si mi tercer favorito y lo quiero por que me dio grandes horas de entretenimiento y buena historia (menos esas primeras 6 horas XD) y luego ver toda la historia que se tejio en su precuela y su peli lo hacen un juego de culto (dirge of cerverus es una de las mierdas mas grandes del mundo FF) Buen juegi