Esperar una cola. Aguantar la ronda publicitaria en la televisión. Confiar en que el camarero no tarde demasiado en hacerte un Old Fashioned. Aguardar a que tráilers de películas absurdas terminen en la sala de cine. Para todas estas cosas y para muchísimas más es necesaria la paciencia. Tener paciencia es un don que no todo el mundo puede proclamar que posee pero es algo a lo que todos nos enfrentamos en casi cualquier circunstancia del día a día. Y el mundo del ocio interactivo no es una excepción.
Cuando uno se pone a enumerar cuáles son las características que hacen a alguien habilidoso en los videojuegos se suele nombrar la pericia, la inteligencia o la capacidad de reacción, entre otras. Es extraño que una aptitud tan común como la paciencia no se tenga en cuenta demasiado cuando hablamos del mundillo. Y joder, la paciencia probablemente sea una de las características fundamentales para cualquiera que quiera pasar un buen rato frente a la consola o al ordenador.
No hablamos de tener paciencia frente a las terribles pantallas de carga, sino de tener buen temple frente a los diferentes retos a los que normalmente nos enfrentamos en cualquier título. Está claro que no solo con paciencia vamos a finiquitar fase tras fase pero es muy importante poseer esta habilidad para hacer frente a pruebas complejas que requieran del método de prueba y error en incontables ocasiones.
Casi cualquier clásico necesita una buena dosis de perseverancia para aprendernos las rutinas y poder hacerlas frente. Muerte tras muerte, iremos aprendiendo como jugar al título en cuestión. Eso es tener paciencia. Actualmente se ha retomado con mucha fuerza las dinámicas clásicas de videojuegos tortuosos donde la paciencia es clave para poder sobrevivir a ellos. Títulos como VVVVVV o Super Meat Boy son dos claros ejemplos de lo que hablo. Ambos son títulos con excesiva mala baba. Vamos a morir mucho ya que es parte del aprendizaje de cada una de las pantallas que lo conforman. Y si tenemos la paciencia suficiente podremos disfrutarlos, de lo contrario acabaremos tirando el teclado contra la pantalla tras sufrir nuestra enésima muerte.
Son videojuegos que invitan a perder la compostura. Títulos que hacen que nos mordamos los labios de impotencia. Juegos que nos hacen apretar los puños y exclamar algarabías al morder el polvo una vez más. Después de intentarlo una y otra vez lanzamos un ultimátum a la aplicación: «cuatro intentos más y lo dejo». Una carcajada es lo que imagino que produciría el videojuego si tuviera consciencia propia ya que después del cuarto intento seguimos intentando pasarnos la jodida pantalla unas cuantas veces más. Ahí es cuando perdemos el control de la situación y entramos en una espiral donde asistimos a la muerte de nuestro personaje de todas las formas posibles sin que podamos hacer demasiado. Hemos perdido la paciencia y con ello hemos perdido el control sobre el juego. En la mayoría de casos solemos abandonar la partida hastiados de tanto repetir la misma acción y solo en algunas y extrañas ocasiones nos podemos terminar la maldita pantalla.
Pero no solo hay que tener paciencia en vídeojuegos realizados para torturarnos sin descanso, hay otros títulos que necesitan de esta sacra facultad para lograr otros objetivos. Los JRPG son muy dados a forzarnos a ser pacientes si queremos llegar al final por culpa de tener que combatir una y otra vez para subir el nivel de nuestros personajes y que no sufran por el camino. Aún recuerdo como yo subí el nivel a la amiga Aeris con la máxima determinación posible hasta que pude usar «Evangelio Final», su cuarto límite. Se decía que así no moriría. Mis cojones.
Hay que tener mucho temple para superar la mayoría de pruebas de cualquier universo interactivo. No importa que sean títulos cuya única misión sea poner a prueba nuestra capacidad de aguante o aquellos que son una isla de paz, en ambos hay retos y en los dos probablemente perdamos los estribos en alguna ocasión. Es normal, no hay que preocuparse. Solo algunos privilegiados tienen ese don a prueba de bombas. Gente como Tarkovski, Angelopoulos o Tarr que tienen la entereza suficiente para mantener el plano donde otros no hubieran aguantado lo más mínimo. Bendita paciencia.
Esa sensación que te queda después de pasarte un nivel tras 30 min. de concentración brutal no tiene precio.
Algo más desarrollado el artículo y gritaría «Kirkis for Jot Down!»
Maskagrillos, pues sí. Es una sensación de alivio sin igual.
Jatamanano, Kirkis está bien en su casa ilustre :)
Ese nivel de Super meat boy para el logro de navidad pasada… pasarselo fue un…
SOY UN PUTO AMO
y lo mismo con Binding of Isaac (que ahora mismo ando golpeando contra las paredes de mi PC)
Gran articulo Kirkis, como siempre.
Lo que pasa es que este artículo es mas de hace 20 años que de hoy en día. Entiendame lo que le digo, algunos seguimos jugando a ese tipo de juegos que requieren paciencia, de hecho yo me enorgullezco de que no me importe repetir un nivel mil veces para hacerlo perfecto y conseguir todos los secretos. Pero lo cierto es que la mayoría de gente ya no opta por este tipo de títulos que requieren mucha de la santa paciencia.
Con todo esto quiero decir que por eso la gente no se le viene a la cabeza la «paciencia» a la hora de pensar en las habilidades pera ser un buen gamer, por que es algo que está en desuso, o eso creo yo, de todos los juegos que me he pasado este año casi ninguno ha puesto a prueba mi paciencia, hablo de los juegos «grandes» o «super producciones»
Ni siquiera el «temido» ZombiU me ha desesperado en ningún momento, yo que se, todavía juego a los Megamans clásicos, para mi todo eso es un paseo. Curiosamente el único que me ha hecho «darme un descanso» por ofuscarme a sido New Super Mario Bros U por que en algunas pantallas es fácil perder decenas de vidas para conseguir las medallas. Eso si, al conseguirlo lo he celebrado como un gol del Atleti.
Del tipo de paciencia que nombras de los JRPG es ya otro rollo, por que es paciencia relajada no paciencia en tensión, y yo que se, no me siento tan orgulloso cuando llevo un personaje de jrpg a nivel máximo como cuando supero una pantalla casi imposible solo con mi habilidad.
Pues eso, muy buen artículo señor Kirkis, está bien que se reivindique a los jugadores pacientes.
Oh, boy. La Warp Zone de The Kid en SMB. Dos putas horas tardé en pasarme esos tres niveles. Ese schadenfreude autodirigido que hace que te partas el ojete de tus errores a la vez que te odias; eso es lo que hace JRANDES a este tipo de jueguicos.
Hombre, claro que esto tira mucho por los juegos antiguos pero como ya digo en el texto, la nueva ola de juegos indies son igual o más cabrones que los antidiluvianos. Ahora mismo estoy con la indiegencia que descubrí el otro día, A Walk in the Dark y es bastante puta. No al nivel de Super Meat Boy pero si es jodida. Tu fijate en la saga Bit.Trip, el VVVVVV, el SMB y demás juego que están creando escuela ahora mismo. Hay que tener paciencia para poder terminarlos o nanay.
Otro ejemplo que podía haber dado pero que nunca he catado es Dark Souls. Ahí si vas a lo loco terminas hecho jirones.
Por ello, ¡vivan los jugadores pacientes! Aunque yo no me incluya en ese selecto grupo.
Joder, has dado en la clave con los videos… cuantas muertes me costo conseguir el jodido disco de VVVVVV; y después de pasarme SMB con sus A+ y todo, aun sigo siendo incapaz de pasarme el puto nivel de I wanna be the guy…
Creo que SMB es el mayor exponente requiriendo paciencia… puede que te tires tus 300 intentos para pasarte un nivel, y al 301 lo consigues y te sientes en el cielo, pero tardan dos segundos en meterte en el siguiente que será mucho más jodido si cabe…no hay respiro jamás…
Yo no llegué a pasarme The Kid. Estuve demasiado tiempo con él y me rendí. ARRG
No estoy de acuerdo en añadir VVVVVV a este artículo. ¿La razón? Que en ese juego solo sientes auténtica frustración en momentos puntuales (veni vidi vici, vértigo o la prueba final, por ejemplo), pudiendo pasar el resto de zonas sin demasiados problemas con solo 4 o 5 intentos. Del resto totalmente de acuerdo, por mucho que aún así admita que soy un «gamer marica» del 15, pues pocos juegos con «dificultad NES» he pasado a lo largo de mi vida…
Querria mencionar otros dos puntos donde los videojuegos no entrenan la paciencia. El primero son esos meses que nos tiramos hypeados ante el siguiente bombazo del mercado. Quiza no tanto ahora, que estamos acostumbrados, pero de crios nos han dado mil palos con eso. Estoy seguro de que el hype ha creado una generacion de gente bastante paciente.
El otro punto es la paciencia desarrollada para realizar tareas aburridas, pero que pueden determinar la partida. Quedarse sentado junto a un punto de choque como engi durante diez minutos, sin que no entre mas que un tio cada dos minutos, requiere muchisima paciencia, pero es algo que puede sellar completamente un mapa de TF2. O el simple hecho de esperar a que se empequeñezca la mirilla como artilleria en world of tanks , rezando porque ese tanque no se mueva del sitio. Tareas que requieren una paciencia y, peor aun, mantenerse tenso todo el rato por el miedo de que algo se estropee si no prestas atencion.
Yo aprendí a tener paciencia jugando a las clásicas aventuras gráficas en tiempos dónde no había internet ni gamefaqs. Algunos puzzles te podían tener atascado toda la tarde y tu ahí, como un tonto ante el monitor combinando tu inventario de todas la formas posibles y rocambolescas, buscando ese maldito píxel escondido en el que se podía leer «llave», etc. Joer, aún recuerdo lo que me hizo sufrir Discworld y lo feliz que me sentí cuando lo terminé al cabo de dos meses de haberlo empezado xD.
Eso sí, para los momentos en que uno se atasca en un nivel en concreto, yo siempre recomiendo lo mismo: espera al día siguiente y vuelve a intentarlo. No sé por qué, pero el porcentaje de veces que me ha funcionado es sorprendentemente alto (eso sin contar cosas como el nivel de SMB, que ni por esas).
DARK SOULS
¡Bendito Kirkis!
Hablando antes sobre la paciencia para Dark Souls, Dragon’s Dogma me está recordando bastante en algunos aspectos (timming en el combate, esqueletos que te joden con un toque -por ahora sigo en niveles bajos- y zonas en las que más vale no meterse… de momento). De hecho, es el primer juego tipo superproducción de este año que me ha llevado al game over con más frecuencia y virulencia. Un hallazgo.
@Obafemi: el caso de las aventuras gráficas es curioso; se moría pocas veces, pero era un género proclive al estancamiento. Molaba que fuesen tan rebuscados :-)
Paciencia… y tesón. Un rasgo que han ido perdiendo los jugadores con el «dámelo mascadito» de la mayoría de juegos a partir de los 16 bits. Por otro lado… TARKOVSKI!
Recuerdo de pequeño que tardé en pasarme una pantalla varios meses
La sensación al pasarselo fue indescriptible
+1… Era casi imposible, no me pasaba mi la 1ª parte xDDDDD
No quiero decepcionarte, pero Dragon’s Dogma baja considerablemente de dificultad a medida que vas subiendo de nivel, mejoras tu equipo y metes en tu equipo a un hechicero capaz de soltar zambombazos de campeonato. Yo al principio también moría bastante pero ahora lo más «complicado» es, salvo algún que otro bicharraco y arquero tocapelotas, pegarse excursiones a pie de un lado para otro.
Y sobre las aventuras, es cierto que hoy hay pocas que supongan un desafío parecido a las de los 90, no sé si es porque son más fáciles o porque después de jugar a un buen puñado de ellas, al final los puzzles se acaban pareciendo de un título a otro. Por cierto, en las de Sierra (Larry, King’s Quest…) sí que se podía morir, cosa que sucedía habitualmente y me resultaba muy frustrante. Muchas de ellas creo que nunca llegué a pasármelas en su día… ^_^u
Buen articulo, y poco más que añadir de lo que habéis dicho entre todos.
Eso me hace replantearme mi actitud de ultimamente de que me lo den mascadito… Y yo antes era de los que tenía infinita paciencia, debo estar haciendome viejo.
Ojo, que yo no digo que haya que celebrar la paciencia en orgías sangrientas y hacer que todos los juegos sean así. Simplemente que hay que reconocerle la valía a esta habilidad.
Los juegos deben ser jodidos… en su justa medida. Luego hay cosas como I wanna be the guy y demás que para mi son tramposos e imposibles de jugar en condiciones. Hay límites que no hay que sobrepasar.
Me encanta este articulo, porque es justo lo que siento que debe de tener un buen juego: momentos en donde tengas ganas de mentarle la progenitora al programador, pero que cuando lo pasas, sientes un gran alivio y sensación de exito inigualable. Para mi es lo mejor que te puede dar un titulo, la satisfacción de hacer algo que creias imposible :D
Ahí tengo al SMB en el mundo oscuro del capítulo 4. Muy de vez en cuando lo saco y me pasó una fase o dos.
Como soy tan torponato en mi caso la paciencia es fundamental.
+1
¡BENDITO SEA EL SOL!
Puff, el nivel de The Kid lo conseguí hacer en las navidades del año pasado para el logrito del carbón. Casi me muero, en serio xDD
Y lo de veni, vidi, vici, horrible, recuerdo que estaba por skype con unos amigos y yo todo desesperado yo y los muy cabrones riéndose de mí, pero al final lo conseguí hacer y tuve que cambiarme de pantalones, hacía tiempazo que no sufría así en un juego (creo que desde el i wanna be the guy, o algún derivado suyo).
La verdad es que la «paciencia» necesaria en tiempos de la NES imagino que obedecía a lo limitado de los juegos; antes eran mucho más cortos, y tenían una «vida» más larga ya que no había tanta oferta y demanda como ahora. La típica curva de dificultad que cada partida, con práctica, te dejaba llegar un pelín más lejos, a darle dos hostias malamente al JEFE del 6to nivel…y repetir el proceso para llegar y darle 3 o 4 y morir igualmente.
Braid con sus estrellas hacía su homenaje-caricatura del fenómeno de la paciencia, en este caso no para pasarte un juego sino para conseguir algo concreto y nimio dentro de él…y de paso plantear al propio jugador por qué coño tanto tesón en tareas tan absurdas. Que suele ser por el simple hecho de que se puede hacer; solo hay que ver la gente que explora cada puto exploit o como se diga del Mario 64 y esas cosas…
Desde luego que el peor exponente de cómo la generación actual ha adaptado esto, son los trofeos. Me recuerda demasiado a la campanilla del perro de Pavlov, y a estas alturas de la película…como que uno pide algo más a un juego.
Gracias por el artículo.
Pues voy a disentir en la primera parte (Que leí ayer en el curro y no pude comentar), relativa a «la paciencia para hacerse algo difícil», porque creo que estamos confundiendo ese concepto (Que se puede relacionar a «tener paciencia porque es un puto coñazo estar repitiendo lo mismo varias veces») con la gente que REALMENTE disfruta pegándose contra juegos con ese nivel de dificultad.
Lo de Vini Vidi Vinci me lo saqué y no por paciencia, sino porque me pareció un reto que merecía la pena intentar superar. Me lo estaba pasando bien, aunque palmara, y creo que es la primera vez que he dado saltos de alegría al conseguir algo en un videojuego.
No sé, muchas veces cuando palmo por algo que «no puedo pasarme» me viene el ramalazo de «venga, una vez más a ver si esta cuela», y no lo relaciono para nada con tener «paciencia».
Ahora bien, el grindeo, según que misiones de ir de A a B (En esquinas opuestas del mapa) sí que llaman mucho a tener paciencia. Aunque en estos casos ya pienso que es un fallo del diseño del juego (En un GTA lo puedo perdonar porque parte de la gracia está en ir de un lado a otro de la ciudad, pero aún así…)
Mi pregunta es qué pinta Tarkovsky en el encabezamiento de este artículo. Tal vez el autor haya querido dar a entender que para ver sus films hace falta mucha paciencia. A no ser que simplemente prefiera ahondar en lo gafapastoso de este rincón del internete.
Donde algunos poneis «paciencia», yo digo que puede ser «falta de tiempo». No tengo tiempo, ni ganas con 2 niños colgando de mi espalda, de pasar 2 horas muriendo salvajemente.
Me gusta la cosa sea dificil, pero por ejemplo lo de los dos videos que habeis puesto es superlativo, el copón, la leche, la repanocha, la monda. Yo habria lanzado el monitor por la ventana.
Yo creo que ni el nivel para retrasados mentales que ahora tanto se estila, ni el otro extremo. Que sea dificil, sí, ridiculamente dificil, no.
Da fuck did i just watch
mas k paciencia lo k yo debo d tener para pasarme IWBTG y ahora katawa shoujo completos es una especie d masoquismo/ honor raro
ese: por mis cojones m paso este juego/ m acabo este libro/ pelicula
Pues yo el Super Meat Boy lo tengo aparcado, creo que después de pasarme al primer jefe. No sé, no me compensa el tiempo que hay que echarle a cada nivel. Vaya juego feo.
Sin embargo, estoy ahora con Maldita Castilla y es diferente: cada vez que juegas llegas un poco más lejos, hay que tener un mínimo de estrategia para enfrentarse a cada enemigo. La jugabilidad está muy ajustada. Nada que ver con Hydorah, también de LocoMalito. Ahí se le fue la mano con la dificultad me parece a mí.
Yo lo había visto siempre más como una especie de auto-competitividad u orgullo mezclado con habilidad, pero sí, es cierto que hace falta paciencia, no lo había pensado. Joder, con lo que molaba pensar que me pasé Veni, Vidi, Vici! por habilidoso y ahora resulta que fue paciente. Bueno, algo es algo.
@Obafemi: Joder, qué grande eso de «esperar al día siguiente y volver a intentarlo». Me ha funcionado en muchas ocasiones. Es magia.
Lo explico en el último párrafo. Si te lo hubieras leído lo sabrías :)
Vale, Kirkis. Okey, Kirkis. Disculpa mi comprensión lectora. Está claro que tanto Tarkovsky como Angelopoulos son dos maestros intumbables del cine. Del último no me vendría mal que me recomendaras alguna película, puesto que sólo he visto Paisaje en la niebla, que por cierto me encantó. Lo de Béla Tarr, sin embargo, entra dentro de lo que podríamos calificar de un abuso (o, cuando menos, un reto) de la inteligencia del espectador, sobre todo cuando uno acaba de soportar el visionado de su film más reciente, transliterado como The Turin Horse. No sé si coincidirás conmigo.
Ojo Ulrich, que yo no digo que sean unos genios a los que debamos idolatrar sí o sí, simplemente son una buena referencia en este artículo donde hablo de tener paciencia ya que los tres autores son pilares básicos sobre como mantener el plano. Incluiría a Haneke pero no tiene tanto que ver con ellos.
Del griego deberías ver El viaje de los comediantes que es una de sus obras más reconocidas y luego seguir con su filmografía si esta película consigue llenarte.
Tarr no es santo de mi devoción. Coincido contigo en que soportar una película suya es algo que merece ser reconocido. Yo aún busco valientes que quieran acompañarme en un visionado de Sátántangó.
Entendido, Kirkis. Ahora sí que me parece muy acertada tu referencia. Es más: sabiendo que hay cinéfilos en EPI, me gustaría ver más analogías cinematográficas. Eso lo hacen muy bien en Anaitgames, aunque allí son demasiado pedantes para mi gusto.
Coincido contigo en que Haneke explora rincones totalmente distintos a la de los viejos maestros del cine europeo. En él, cobra más protagonismo la exploración psicológica de la violencia, por poner un ejemplo. Es un tipo de cine único en su especie. De Tarr sí que he visto bastantes cosas, y te puedo asegurar que no siempre es igual de plomizo que en Sátántangó. De hecho, si has visto el cine al que se dedicaba en su etapa inicial (más clásico y, por así decir, naturalista), comprobarás que es un director de lo más versátil. Armonías de Werckmeister es canela fina, quizás su película más equilibrada.
Ah, y gracias por la recomendación de El viaje de los comediantes, que visionaré a su debido tiempo.
Paciencia la que había que tener para esquivar 200 rayos seguidos en cierto nivel del Final Fantasy X, y todo para poder conseguir un objeto necesario para una de las armas secretas de uno de los personajes. También en uno de los niveles de cierto megaman X del playstation one, creo que era en el X6, donde te ponían en una especie de moto futurista e ibas a toda velocidad intentando no chocar ni caerte, después del milésimo intento desarrollabas una precisión increíble, casi hasta sin ver te podías pasar el nivel, xD!!!
Qué gran verdad. Sin duda a parte de la pericia la habilidad más indispensable en determinados juegos es la paciencia.
Aún me entran sudores cuando recuerdo los callos que me salían jugando al Super Meat Boy, las fases Extremas de Trials, algún COD de los primeros en veterano…ufff
Y también ese momento en el que entras en trance y suicidas a tu avatar una y otra vez sabiendo que no vas a superar el desafío como castigándolo por tanto sufrimiento.
Por cierto el VVVVVV no me lo jugué. Pero el Super meat boy si me lo he pasado todo excepto el mundo de las sombras. El Cave Story al igual el final difícil requiere este tipo de paciencia y me gusta ver hoy días juegos nuevos que recojan está dinámica de juego de antaño.