Todas las plataformas... o casi...

Esto iba para chorriartículo y la cosa se ha salido de madre. La cosa puede ser peor de lo que temía, una parida de cojones. La idea inicial era asociar las consolas y computadoras más relevantes con una película, un videojuego, algún manjar o cualquier cosa que rondase mi cabeza. Poco a poco, bajo la excusa de «esta no puede quedar fuera», he ido recopilando más de las que en un principio había deseado; cambiando así la premisa del artículo para convertirlo en una especie de base de datos visual casual. 516 cacharros que a lo largo de más de tres décadas nos han hecho soñar como golfos y disfrutar más que los gorrinos en el lodazal. Ahora bien, tras el salto no esperéis especificaciones técnicas ni polladas. De hecho, todavía no sé que encontraréis… como rezaba el letrero colgado en la verja del castillo de Frank N’Furter en The Rocky horror picture show: ¡Enter by your own risk!

¡PATAPAM! La primera. Lo digo una vez y no más… clickad sobre la imagen para verla en todo su esplendor. Cada imagen son dos páginas y están ordenadas cronológicamente (por año) y alfabéticamente. Dicho esto, repasemos.

Las primeras consolas vivieron básicamente de Pong y Pinball; por lo que las asociaría al boom de las pelis de Kung-Fu de esa misma época. Podría haber elegido otra serie de pelis, como las pertenecientes a la Blaxplotation… pero Pong me suena más a chino. Así que si Pong es Bruce Lee, por esta misma regla de tres la Atari Super Pong (1976) vendría a ser Karate a muerte en Bangkok (Wei Lo, 1971) y una mucho más apañada, con más juegos, como la Atari 2600 (1977) sería Operacion Dragón (Robert Clouse, 1973). La Atari Stunt Cycle (1977), por su diseño motard, la encajaría con Y si no, nos enfadamos (Marcello Fondato, 1974)… peli que combina la moda de moteros con las hostias como panes de Bud y Terence.

Por otro lado, no puedo dejar de pensar en las Coleco Telstar… más que Kung Fu me sugieren aquellos hilarantes filmes de ciencia ficción y platillos volantes de mediados del siglo pasado. Por nombre y diseño. Fijaos bien en la Coleco Telstar Arcade (1977) y la Coleco Telstar Combat! (1977). ¿No os parecen los mejores diseños de la historia videojueguil? ¿No os recuerdan a pelis como Los marcianos invaden la Tierra (Gordon Flemyng, 1966)? Apple II (1977) y el Commodore Pet 2001 (1977) comen aparte. El primero sería La semilla del diablo (Roman Polanski, 1968).

Aparece Nintendo y se imponen las pistolas como periférico preferido. En el primer caso, las Color TV y el Nintendo Racing 112 (1978) podrían verse como las primeras películas de George Lucas, THX 1138 (1968) y American Graffiti (1973), respectivamente. El chico promete, pero todavía no revienta taquillas. En el segundo caso, centraos en la disyuntiva que planteó Coleco ya en 1978 -y que todavía perdura- respecto al diseño de sus pistolones. ¿Realista rollo Magnum 45 de Harry el sucio o sideral tipo Star Wars a la mode? Aunque bien mirado y debido a las prestaciones de la Gemini y la Marksman, la cosa quedaría en El justiciero de la ciudad (Michael Winner, 1974) y La fuga de Logan (Michael Anderson, 1976). Otra de pipas destacable es la Pizon Bros Visiomatic 101 (1977), con su maletín y todo. Jamás intentéis subiros a un avión con ella.

Dos nombres: Fuji Electron Sportstron TV-Game Coca-Cola Edition (1978) y Epoch TV Vader (1978). No las he visto en mi vida -como el 70% de la recompilation- y me imagino que serán una castaña de siete pares de cojones; pero quiero de cada diez. Ya. Por seguir con las asociaciones chorras, diré que las Game & Watch (de 1981 en adelante) vendrían a ser como la serie de dibujos animados Droids (1985). No tiene la calidad de las primeras pelis de Star Wars, pero salen sus protas, es entretenida y de mocosos nos flipaban. Por su parte, El IBM de 1981 que sale en la esquina de abajo a la derecha sería algo así como 2010: Odisea dos (Peter Hyams, 1984. IBM nunca me parecerá un Kubrick si hablamos de videojuegos). Ciencia ficción seria que aún hoy en día poca peña entiende.

Aquí hay tela que cortar. Los maquinones de Sir Clive Sinclair y los de Atari comienzan a pegar fuerte de verdad,  -especialmente el ZX Spectrum y la Atari 2600- Sega y Nintendo toman posiciones y llega el Spectra Video 318 de Matsushita Electronics (que posteriormente cambiaría su nombre por el de Panasonic), el primer MSX. Con todo, cabe apuntar que fue Sony la compañía que compró los derechos de distribución y venta del emergente hardware MSX. Debido al dominio de Spectrum en Europa y de Apple y Commodore en Estados Unidos, las MSX no se afianzaron en el mercado occidental hasta que Konami decidió petarlo con Frogger, Super Cobra, Billiards y Time Pilot, primero, y con sus MegaRoms tres años después. ¿Qué peli sería un MSX? Teniendo en cuenta su superioridad respecto a otras máquinas de videojuegos de la época, me viene a la cabeza Apocalypse Now (Francis Ford Coppola, 1979); probablemente influenciado por los primeros pasos de su épico Metal Gear. Por cierto aprovecho para señalar que aunque haya incluido varios modelos de MSX, no están todos. Necesitaría otro artículo para nombrar la infinidad de modelos que han ido saliendo a lo largo de los años.

Mención obligada merece el Apple II; que emparejaré sin dudarlo con Blade Runner (Ridley Scott, 1982). Por su condición de referente como sci-fi gafapasta stylishly de gama alta, sí, pero también por compartir realizador en aquel orwelliano spot que petó las TV de tubo del 84; que por cierto también fue un año en el que algunos iluminados vaticinaron el fin del mundo.

Probablemente en esta página ya reconoceréis a la mayoría. Los videojuegos habían superado la crisis del 83 y cada vez eran más los hogares en los que se escuchaban los dulces y psicotrónicos sonidos de Gradius, Pacman y Super Mario, entre otros. Sí, Mario. Aunque no era ni de coña la mejor máquina expuesta en la anterior foto, la NES y su fontanero fueron los que reventaron el mercado de arriba abajo y de izquierda a derecha. La Master System estaba allí, pero el volumen de ventas de NES, su fastuoso catálogo y el carisma de sus personajes exclusivos no tuvo competencia en cuanto a ventas y popularidad se refiere. ¿Una peli? En un principio pensé emparejarla con el Tiburón de Spielberg, pero creo que me decantaré por el que considero primer gran blockbuster de la historia: Lo que el viento se llevó (Victor Fleming, George Cukor y Sam Wood, 1939). La ocho bits de Sega vendría a ser entonces algo así como Caballero sin espada (Frank Capra, 1939), que es igual de buena pero tuvo algo menos de repercusión. Además, Sega no obtendría su primera espada hasta 1991 con la llegada del erizo -vuestro gigoló favorito- azulado. Lo siento, Alex Kidd; tú molabas, pero nunca fuiste un primer espada.

Siguiendo con las comparaciones, me resulta inevitable no emparejar los ZX Spectrum con Los Goonies (Richard Dooner, 1985). Perdíamos el culo por ser uno de ellos, pero vista hoy en día da bastante grima. Incluso la pelirroja que iba de buenorra ya no pone. La otra cara de la moneda son los Commodore Amiga 500 y más; auténticos maquinones que conservan prácticamente intacta la magia que nos sedujo hace veinte años y pico. Lo mismo que me sucede con Dentro del laberinto (Jim Henson, 1986); uno de los escasos filmes para niños que siguen molando cuando eres adulto Peter Pan. Además, salían David Bowie y Jennifer Connolly cuando era bollycao… que, puestos a seguir con la descabellada comparativa, vendrían a ser a la peli lo que el digitalizador de sonido DSS8 y Sensible Software significaron para el Amiga. Ya, ya, ya, muchos pensaréis ¿Qué coño… Caballero sin espada era mucho mejor que Dentro del laberinto y la Master System no le llegaba a limpiar la mierda de los zapatos al Amiga 500? No os comáis mucho la olla… las asociaciones con pelis las hago a bote pronto y una no tiene porqué estar ligado a otra. Mi cabeza funciona así. Sobre la marcha y a base de impulsos.

Canela fina. Antes de empezar a chuparnos los rabos recordando a las 16 bits y demás, merece la pena detenerse un instante ante la que todavía puede ostentar con orgullo el título mundial de peor consola de la historia: Worlds of Wonder Action Max (1987). No negaréis que el nombre de la consola es sublime. ¡Action Max! ¿Y porqué peor que una NASA o cualquier clon tarado de la Game Boy como el Fortune Hand System, por ejemplo? Simplemente por que el concepto base de la WoW AM es el anti gaming por excelencia. Me explico. A mediados de los ochenta muchos pensaron que la técnica Full Motion Video iba a ser el futuro… y algún iluminado de la compañía Worlds of Wonder pensó: tate, si el cd-rom es prohibitivo y el Laserdisc demasiado costoso… ¿Porqué no sacamos los juegos en VHS?. Sí, en VHS. Los juegos venían en cintas VHS. La bomba. ¿Pros? Que los gráficos eran de imagen real y el sonido como el de una peli. ¿Contras? Todos. ¿El peor? Que proporcionaba menos interactividad que una brizna de tabaco seco. Es decir, la acción que se desarrollaba en pantalla estaba pre-grabada e hiciésemos lo que hiciésemos siempre veríamos las mismas imágenes. El pack de WoW AM incluía la consola con un contador de puntuación de pantalla LCD, un sensor y una pistola. No había mando. Todos los juegos eran shooters. Ah, y el reproductor de VHS lo poníamos nosotros. Lo dicho, canela de la buena. El contador anotaba nuestros aciertos, sí, pero estos no se reflejaban en la pantalla. Dicho de otra manera, si acertábamos a un avión éste no caía derribado. Por lo que, a fin de cuentas, daba lo mismo acertar que fallar… el VHS seguía rulando hasta el final. Además, en caso de cabezonería y de querer amasar puntos, nada nos impedía rebobinar la cinta. El «éxito» se saldó con un catálogo de cinco juegos. Como curiosidad, apunto que el célebre Night Trap que vimos unos años después en Mega CD estaba previsto para esta Action Max. ¿Y si fuese una peli? Hombre, al decir «peor consola de la historia» seguro que muchos no podrán evitar pensar en algún filme parido por Ed Wood Jr.; pero por quedarnos en los 80, el VHS y las drogas duras diré que me recuerda a Cielo líquido (Slava Tsukerman, 1981).

Otra consola raruna fue el Barcode Card Battle System; algo así como una especie de cartas Magic sin más gráficos que las estadísticas de nuestros guerreros imaginarios. En vez de cartuchos empleaba códigos de barra. El experimento no funcionó en Europa -llegué a jugar a esto en Irlanda- pero se ve que en Japón fue la polla y que incluso Nintendo llegó a lanzar periféricos con lectores de barra para sus Famicom y Super Famicom. Si fuese cine, esto sería dogma como mínimo. Y probablemente del malo. Fuckland (José Luis Marquès, 2000), por ejemplo.

Nichiman y Super Com se las traen, pero de los clones tarados de SNES que sacaron en la época me quedo sin duda con la Superman. Olé los huevos del campeón que la bautizó con el nombre del kryptoniano de la gran S. No basta con fusilar el diseño de la carcasa; el nombre debe tener tirón y ese tipo lo sabía.

A destacar los maquinones que entonces sacaba NEC (la turboexpress siempre me ha parecido una puta maravilla), el Sharp X68000 que tanto le gusta al amigo Adol del rincón, la simpática Amstrad GX 4000 y por supuesto las más famosas de Nintendo y Sega. ¿Qué peli sería la Game Boy? Toy Story (John Lasseter, 1995). Peliculón para todas las edades. ¿Quién no ha tenido al abuelo enganchado al Tetris? Sigamos. ¿Y la SNES? La guerra de las galaxias (George Lucas, 1977), su fantabuloso Modo 7 no es menos que la Industrial Light & Magic. Ah, no temáis… al paso que vamos Disney no tardará en hacerse con Nintendo y podremos ver como el círculo se completa: Mario con sable de luz batiéndose en duelo con Darth Mickey. Perversiones, perversiones… calentorro y enfermo me pone la idea. ¿Y la Megadrive? El catálogo de la 16 bits de Sega siempre me pareció más oscuro, así que soltaré una animalada para seguir con el tema galágtico: Aliens, el regreso (James Cameron, 1986), el Mega CD sería la extended version. ¿Game Gear? Naves misteriosas (Douglas Trumbull, 1972). ¿Atari Lynx? Guerreros del espacio (Stewart Raffill, 1984). ¿Y la Neo Geo, el rolls royce de las consolas de entonces? Por músculo y una manera de entender el videojuego-espectáculo ya casi extinta me decanto por Ben-Hur (William Wyler, 1959).

Comprendedme, son chorrecientas consolas y las comentaría todas. Pero ni el cuerpo ni la mente ni el tiempo disponible me dan para más… el chorriartículo es la excusa para colaros el mega montaje de consolas y ordenatas que he ido confeccionando a mi puta bola durante las últimas semanas, pero… ¿Cómo no mencionar una portátil que tiene como nombre Mega Duck? ¿O el Sega CD de Aiwa? ¿Y que decís de la Sega Pico? ¿O el 3DO de Goldstar con el que nos corrimos de hype gracias a la Hobby Consolas y que después resultó ser un fracaso estrepitoso? Dios, miradlas bien. ¿No os molaría tenerlas todas, incluso las más mierder como ese clon tarado que responde al nombre de Songa? En fin, que esto es delirante… os he preparado el foto montaje y yo asociando consolas con pelis. Esto es lo que pasa cuando uno deja de fumar marihuana durante unos meses. En fin, lo dicho… a mi puta bola.

Si me dejasen elegir una consola de esta doble página, dudaría… Son muchas las candidatas; pero por orgullo freakie elegiría la Sega Pods. ¿Que qué coño es? Pues algo así como el juego de Simon pero en plan futurista y sin la gracia retro cool super guay del Simon original (os advierto que en eBay valen una pasta). Total, que ni es consola ni es na’… pero es de Sega. Y es un Simon. Mola. Mazo. A cascoporrillo y más allá. Otra posible elección sería la Sega Nomad… siempre me pareció muy ósom eso de tener una Megadrive portátil con cartuchos no portátiles.

Vamos con las pelis (yo a lo mío): ¿Sega Saturn? Muerte entre las flores (Joel y Ethan Coen, 1990); ¿Playstation? Terminator (James Cameron, 1984); ¿Virtual Boy? Tiburon 3 (Joe Alves, 1983); ¿R-Zone? El ataque del tiburón de dos cabezas (Christopher Ray, 2012). ¿La NEC PC Engine Duo RX? La cosa, el enigma de otro mundo (John Carpenter, 1982). ¿Nintendo 64? Monstruos SA (Peter Docter, Lee Unkrich y David Silverman, 2001). ¿Y la fallida Bandai Apple Pippin? La puerta del cielo (Michael Cimino, 1980). Vamos a por la siguiente remesa.

De aquí, volviendo al tema del naming de los clones tarados, debo destacar la Game Theory Admiral. Fusila el diseño de la Game Boy Advance, sí; pero lo que más me apasiona son las siglas de su abreviatura: GTA. Eso es visión comercial y el resto son paridas. Además, si podéis ampliar la imagen fijaos que en la esquina superior izquierda de la caja incluye la palabra Mistery. ¿Inquietante, no? Comprarse una, desenvolverla y jugar con ella debe ser una experiencia parecida a la que podría tener un niño de seis años que, tras una sesión de circo en Navalcarnero, acude todo ilusionado a la caravana de los payasos para pedirles un autógrafo y se los encuentra chutándose un pico de jaco. La cruda realidad.

Vamos con las asociaciones. ¿Sega Dreamcast? Yojimbo (Akira Kurosawa, 1961) ¿Neo Geo Pocket Color? Troya (Wolfgang Petersen, 2004) ¿Playstation 2? Terminator 2 (James Cameron, 1992) ¿Microsoft XBox? La roca (Michael Bay, 1996) ¿Gamecube? Los increíbles (Brad Bird, 2004) ¿Gameboy Advance? Toy Story 2 (John Lasseter, Ash Brannon y Lee Unkrich, 1999), ¿Atari Flashback? Grindhouse (Quentin Tarantino y Robert Rodríguez, 2007) ¿Nintendo DS? Toy Story 3 (Lee Unkrich, 2010) ¿Nokia N-Gage? Perdidos en el espacio (Stephen Hopkins, 1998) ¿PSP? Aterriza como puedas (Jerry & David Zucker y Jim Abrahams, 1980), que es un peliculón pero la peña se la toma a coña. ¿iPhone? Los Tenenbaum, una familia de genios (Wes Anderson, 2001) ¿Cualquier móvil con sistema Android? Recortes de mi vida (Ryan Murphy, 2006), que es como un intento de Wes Anderson movie pero en mal. ¿Gamepark holdings GPX2 Wiz? Easy Rider (Dennis Hopper, 1969). Por lógica aplastante la Playstation 3 debería ser Terminator 3 (Jonathan Mostow, 2003) o bien, por seguir con Cameron, Titanic o Avatar… pero como es la cafetera que en la actualidad más disfruto, haré trampa y le subiré el rango. Pongamos El caballero oscuro (Christopher Nolan, 2008). ¿La XBox 360? Transformers (Michael Bay, 2007). Ah, que pelotudo es el sonyer que llevo dentro… Mi Perdición (Billy Wilder, 1944) ¡Siguiente y última!

Al margen de NASA, si hablamos de clones tarados populares hemos de referirnos a las Polystation. El resto se las traen -especialmente la Ninetudo DS- pero las Poly tienen encanto. Especialmente la 3 que recupera el maletín no apto para viajes aéreos. Si fuesen pelis es imposible no referirnos a Terminator 2 (Bruno Mattei aka Vincent Dawn, 1990), Alien 2: sobre la Tierra (Ciro Ippolito 1980), Año 225: después del holocausto (Bruno Mattei, 1984), Alien versus Ninja (Yuji Shinomura y Seiji Chiba, 2010) o Hard ticket to Hawaii (the great Andy Sidaris, 1987). Apuntad bien el nombre de estos títulos porque son crema. Mención aparte merece la Treamcast, un clon bastante fiel a la original Dreamcast, que contaba con pantalla incorporada. Del resto diré que el iMac sería Life Aquatic (Wes Anderson, 2004), el iPad vendría a ser Moonrise Kingdom (Wes Anderson, 2012) –dejo Academia Rushmore para cualquier G5, mac book u otro modelo de Apple que no he añadido-, la PSP Vita Agárralo como puedas (David Zucker, 1988), la 3DS otra vez Toy Story 3 pero en 3D… la Wii U me sugiere algo así como Harry Potter y el prisionero de Azkaban (Alfonso Cuarón, 2004). Ouya está por ver, pero por aspecto y posibilidades me inclinaría a pensar que eso va a ser Mulholland Drive (David Lynch, 2001). Con la de Valve y el Sfere -que no he incluido por falta de tiempo- no me atrevo a pronosticar nada. Mi ansiada Neo Geo X sería la versión remasterizada en Blu Ray de Ben-Hur.

¿Y PC Jesus? ¿Cual le adjudicamos? Depende, si juegas a triples A modeados y todo eso Los diez mandamientos (Cecil B. DeMille, 1956); si te van las indiegencias El evangelio según San Mateo (Pier Paolo Pasolini, 1964). Cosa seria. ¿Y las máquinas Arcade? El crepúsculo de los dioses (Billy Wilder, 1950), sin duda.

Las 360 gamers también molan

Ahora decidme… ¿Cuáles tuvisteis? ¿Cuales os molaría a dolor tener? ¿Cuales habéis echado en falta? ¿Qué pelis serían vuestras consolas?