Gracias a servicios de distribución digital como GOG.com, y en especial a sus disparatadas ofertas, muchos jugadores pueden acceder por primera vez a videojuegos que, año arriba o año abajo, son de su quinta. Estos juegos, de los que en muchas ocasiones se hablan maravillas, presentan una serie de barreras de mayor y menor altura que algunos nunca pueden llegar a saltar. Quiero pensar que la de los gráficos, al menos, todos la tenemos más o menos superada, aunque sea por el auge de los juegos independientes de pixelazo. La de la curva de aprendizaje y la dificultad, sin embargo, mucho me temo que suele ser la que termina zancadilleando a más de un valiente. Y señores, no deberíais dejar que un juego os hiciese eso nunca.
Baldur’s Gate, Arcanum o Divine Divinity, como todos los habituales sabéis, son algunos de mis videojuegos preferidos. Los tres tienen muchas cosas en común, todas buenas, y una de ellas es que tienen un principio muy duro. Tras salir de Candelero, donde tiene lugar el perfecto tutorial de Baldur’s Gate, nos encontramos con nuestro personaje de nivel 1 perdido en un bosque, con la única ayuda de la molesta Imoen. Si llevamos a un guerrero o a un paladín estamos bien. Pero si, como a un servidor, nos gusta llevar ladrones o magos, lo más posible es que nuestro personaje muera en menos de cinco minutos en las fauces del primer lobo enfermo que encontremos. Es así. A mí me ha pasado mil veces. No hay ninguna vergüenza en ello.
Más doloroso aún es el caso del infravaloradísimo Divine Divinity, en el que durante la primera hora de juego nos topamos con un vampiro capaz de asesinar a nuestro personaje (sea de la clase que sea) con tan solo soplar fuerte. Eso por no hablar del grupo de orcos que, tras humillarnos, nos perdona la vida porque no suponemos la más mínima amenaza para ellos. Por supuesto más tarde esos mismos orcos pagan cara su ofensa… pero es mucho más tarde en la historia. Y la lección posiblemente ya la hemos aprendido unas cuantas veces.
Todos los que hemos jugado a rol de lápiz y papel, especialmente a Dungeons & Dragons o El Señor de los Anillos, sabemos que con un personaje de nivel 1 no hay que hacer tonterías. Hoy en día estamos acostumbrados a morir muy poco. Es como si en los últimos años, los desarrolladores y los jugadores hubiesen hecho un pacto inconsciente por el cual está prohibido morir durante las dos primeras horas de juego. Y eso nos ha malacostumbrado. En World of Warcraft es posible matar decenas de cangrejos con un personaje recién creado, pero intentar lo mismo en una partida de rol de verdad posiblemente termine con tu ficha en la papelera… y las consecuentes risas del resto de jugadores, claro.
Durante la primera media hora de mi partida de Arcanum tuve que cargar la partida como media docena de veces. Mi manía de hacerme un mago, algo especialmente delicado en un mundo steampunk, me volvió a jugar una mala pasada con los perros salvajes del principio del juego. El truco para seguir adelante fue perseverar. Aunque si tuviese que dar un truco, posiblemente sería no comenzar tu primera partida con un mago elfo que ha vendido su alma al diablo. Sé que es un concepto molón, pero no uno especialmente práctico.
Dark Souls y su hermano mayor Demon’s Souls son especialmente famosos, precisamente, por atenerse a estas reglas de juego arcaicas. Recuerdo perfectamente como tardé cerca de diez o doce horas en descubrir lo útil que era la pausa táctica en Baldur’s Gate. Y de la misma forma recuerdo perfectamente cómo, habiéndome terminado ya Dark Souls una vez, todavía no sabía muy bien para qué servían la mitad de mis objetos. Es un acercamiento distinto al propio concepto del videojuego que exige mucho más por parte del jugador. Lo normal hoy en día es que nos lleven de la mano y nos expliquen exactamente qué tenemos que hacer y cómo tenemos que hacerlo. Eso, en los juegos de rol de los noventa (y en Dark Souls), no ocurre.
Hagamos un símil cinematográfico. A la gran mayoría nos resulta más sencillo enchufar una película de Jason Statham y verlo repartir guantazos durante hora y media, que ponernos a ver Lawrence de Arabia durante las cuatro gloriosas horas que dura. Es posible que, tanto los que tenemos cierto bagaje en el mundo del cine como los que no, sepamos de buena tinta que la segunda película «es mejor» que la primera (o no). Pero sencillamente apetece más y resulta más ligero ver la calva de Statham que el turbante de O’Toole. Ahora bien, si hacemos un esfuerzo (como yo hice en su día), le echamos valor, aguantamos las dos primeras horas, e intentamos sumergirnos en lo que se nos está intentando contar, posiblemente terminemos apreciando más Lawrence de Arabia. Y lo mejor, hay posibilidades de que nos pique el gusanillo y queramos ver El puente sobre el río Kwai, que es bastante mejor.
Todo este rollo, por cierto, viene a colación de una pregunta que me dejaron hacer unas horas en tumbr, en la que me sugerían que escribiese algo sobre «cómo afrontar un juego como Baldur’s Gate«. No sé si lo he logrado. Para mí, que he conseguido hacer este camino inverso hacia videojuegos más viejos que yo, la clave es perseverar y asimilar. A muy poca gente le entrará más fácilmente un Zork que un Battlefield, pero los que no desistan con el primero es posible que se lleven una grata sorpresa. O eso, o que no quieran volver a ver una aventura conversacional en su vida.
También se puede hacer algo intermedio, un primer nivel/zona etapa muy bien diseñada donde se centren sobretodo en que aprendas a jugar en vez de enemigos má fáciles y tal.
Por ejemplo recientemente en el MGR eche de menos eso, medio modo normal queda a medio camino entre un tutorial (por que para que no te maten te petan a items de vida y opcion de regenerar) para una vez dominado conseguir S o pasar a dificultades de verdad (afortunadamente las dificultades superiores son muchísimo más que cambios en los atributos, enemigos que parecen, IA, agresividad, parece casi otro juego).
CUando en realidad lo suyo hubiera sido que en el primer nivel te enseñaran bien al menos en bloquear y contratacar, aun a costa de que el primer nivel fuera muy cerril .
Pero tampoco veo normal lo que en parte dices, que te maten no por imprudente, si no por que no tienes mucha idea de como se juega.
NO hay que odiar tanto a Imoen XD
Joder macho, justo hoy he empezado el Baldurs de nuevo por la oferta de Steam, también da la casualidad de que siempre me hago ladrones, pues ¿sabes que pasó tras ir a saquear los cadáveres de los compis de sarebok al salir de candelero? pues que apareció un lobo de mierda y se cargó a Imoen. ¡QUITA EL PROGRAMA ESPÍA DE MI PC! xDDD.
Supongo que esto de la dificultad va bastante en consonancia con aquello de «La letra con sangre entra». No veo porqué no te han de matar si no tienes idea de cómo se juega: es más duro, pero a la larga más gratificante (en mi opinión, claro).
Son formas de disfrutar los juegos, supongo…
BTW, ¿ánde se puede conseguir el Arcanum?
estoy muy de acuerdo con el arti-culo (y a mis recientes adquisiciones en GoG -Realms of Arkania I-II-III y Might & Magic completos- me remito).
siguiendo con la comparativa peli de Statham-Lawrence de Arabia, diría que una de las principales taras que suelen aparecer para jugadores algo más jóvenes (hablo por mi hermano pequeño) es precisamente la misma a la que hace referencia el símil, el aspecto visual.
por mi parte, reconozco que a veces se me hace difícil afrontar alguno de estos «clásicos», no ya por la parte de los gráficos, sino por la inmersión. no obstante, poniendo un mínimo de interés (algo básico y fundamental para cualquier propósito en la vida) y tomándote el tema como lo que es (un simple videojuego, existe para que tú te diviertas) la cosa cambia y de qué manera.
y aquí me tenéis disfrutando estos días del World of Xeen como un enano de 8 años (los que tenía cuando salió a la venta :)
como aporte final, quiero ser muy «pesao» en la idea de que todo esto es extrapolable a: música, cine, literatura…
Esta gráfica la vi yo en un artículo de Viruete que hablaba de la cuarta edición de d&d y creo que viene bastante al caso: http://1.bp.blogspot.com/-ihcRv_cJmVw/UROrOgsJ3rI/AAAAAAAAAVM/81CXxmSbJ4g/s400/graph%25283%2529.png
Es el nº de goblins que un guerrero de nivel 1 puede matar de media antes de morir en cada edición del juego. No es sólo que vaya subiendo el número…es que de la tercera a la cuarta casi se duplica.
Con esto lo que se ve es que no es algo exclusivo de los videojuegos, si no que, en general, el consumidor se ha vuelto mas monger y quiere morir menos, porque tiene otras mil quinientas cuarenta y dos formas distintas de ocio que no le frustran de forma inmediata, y puede mandar a paseo tu juego/novela/película a las primeras de cambio. El mundo va ahora más deprisa, y el ejemplo de Jason Statham/Laurence de Arabia es bastante acertado: es la época de lo fácil y rápido.
@hujiko: World of Xeen. :________)
Lo tengo en caja grande, con su mapita y todo.
Sere franco y dire:
«Españoles quememos a este infiel por mezclar en una sola frase a STATMAN y LAUREN DE ARABIA»
Al calvo ese que le aguante su puta madre y a vin diesel más todavia.
¿Otra vez con lo del tiempo pasado fué mejor? No puedo estar más en desacuerdo con la entrada. Y los símiles no pueden estar más cogidos con pinzas.
En el rol de lápiz y papel, el máster no acostumbra a poner enemigos tochos de buenas a primeras pa cargarse la gente (depende de la partida, claro), más que nada porque luego ¿Qué historia va a contar? Usando D&D, ¿Para qué sirven pues las VD? ¡Para ajustar los enemigos al nivel del grupo, coño!.
Segundo, en lo de lawrence y Statham, pues que quieres que te diga… Lawrence de Arabia es un truñaco padre, y Statham tiene la capacidad de actuar de un vegetal comatoso. Hay pelis intermedias que se mean en la boca de lo que has nombrado.
Resumiendo, no , lo siento, pero la diversión en un juego está en que la dificultad se adapte al jugador, no que el jugador se tenga que saber el truco del almendruco del juego desde el minuto cero para que no lo revienten a los tres microsegundos.
Servidor, con el tema de los gráficos, tiene una especie de umbral raro. No sé decir dónde está ese umbral, pero sé con solo ver varias capturas del juego que sea si pasa o no el umbral gráfico que soporto. El umbral que soporto es bastante amplio, pero hay cosas con las que ya no puedo, será porque lo que había cuando yo era un moco era mucho más avanzado que eso ya…
Con lo de la dificultado estoy de acuerdo con Andresito. Sin ser yo especialmente habilidoso o persistente, entiendo que un juego dificil no es malo por ello, y que llevar a los jugadores de la mano y no morir ni una vez en un juego sí que es un aspecto malo.
Por otro lado pienso que un punto medio es lo ideal, y que te dejen elegir también. Si quiero un juego en el que no muera ni una vez, pongo nivel «Fácil», si quiero que sea jodidísimo, pongo «Difícil». Lo que no me parece correcto es que en el modo «Normal» haya que morir 15 veces hasta «cogerle el truco» al juego. Morir 4 o 5 veces vale, pero tantas me parece ya pasarse xD
Aún con todo, me parece que con la inmensa oferta en videojuegos que disfrutamos hoy en día hay hueco para todo: para juegos que nos quieren divertir con algo sencillo, fácil y directo, y para retos mucho más complicados que quieren que el jugador tenga que comprar 3 mandos/teclados nuevos antes de terminar el juego. Y para eso valen también las comparaciones con cine, música…
A mi me dio una epoca tonta cuando tenia 13 y 14 años en la que con el auge de la Psx y sus 3D me dio por los juegos 3D y esa obsesion me hacia que viera todo lo demas como mierda inferior y desfasada.
Una vez ya pasada la edad del pavo y la tontura, pude seguir disfrutando de juegazos como los Ultimas, los Ufos, los Civilization y otros tantisisisimos juegos que me han producido unos enganches y unos grados de inmersion y anonadamiento hacia la pantalla, que dificilmente lograran todos esos titulos peliculeros que son tan consumidos hoy en dia como las hamburguesas del Mcdonalds o el tinto don simon en los botellones.
Opino igual. Pero está de moda ser chupiguay por haber vivido la época del videojuego donde los desarrolladores pasaban de crear una curva de dificultad que no te hiciese tirar 50 mandos por la ventana (o 50 teclados). Se intenta vanagloriar todo lo pasado, cuando desde entonces ha mejorado mucho TODO, pero todo (en cuanto a técnica, porque la avaricia por desgracia también ha aumentado mucho).
Parece que la gente cuando juega a juegos, más que un desafío, quiere que le practiquen la sodomía salvaje, propia más del sadismo que de diversión. Pues perdone usté, pero yo no tengo suficiente horas como para gastar la mitad de mi tiempo cargando partida. Y si me ponen un juego así, tardare media hora en dejarlo abandonado y dedicar mi tiempo a algo mejor.
Muy en desacuerdo en todo. Lo primero, Lawrence de Arabia es una pelicula megahit de su época. Es El Señor de los Anillos de la época o similar. Al que no le entre de primeras Lawrence es porque el medio avanza y los planos cambian. Nada que no se arregle en un rato si se tiene interés.
Luego en los videojuegos, que es lo que nos compete aquí, algunas veces se confunde la «curva de dificultad» con «mala jugabilidad» o «controles ortopedicos».
Es como decir «antes no teniamos luz para iluminarnos, y tenia que encender una hoguera para cocinar después de cortar leña, ahora dais a un interrumptor y encendeis la luz y teneis la vitroceramica…antes si que sabiamos»
Obviamente ahora hay muchos juegos muy fáciles, demasiado, pero ni todo lo anterior era mejor ni todo lo nuevo es pan comido. De hecho, creo que ahora hay juegos mucho más difíciles que la mayoría de los de antes, que en muchos la mayor dificultad era no poder salvar y tener igual 3-5 vidas para todo el juego (que duraba como mucho 2-3 horas).
-Todo aquel que afirma «todo lo pasado fue mejor» es un pedorro.
-Todo aquel que afirma «Lo nuevo siempre está mejorado» es otro pedorro.
Que yo sepa el artículo no trata de eso, sino de que cada vez más gente llora como una nena cuando se enfrentan a un reto, ergo ahora los juegos son más facilones que antes.
Tampoco es que antes fuera la panacea, todos conocemos casos en que se alargaba el tiempo de juego a base de dificultad salvaje, y todos sabemos que a día de hoy existen juegos con dificultades chungas. Lo que es un HECHO, es que de estos hay menos que de los que te lo dan todo mascado. Y punto.
Bueno, creo que el artículo en ningún momento dice que «todo tiempo pasado fue mejor», simplemente anima a cambiar un poco nuestra forma de acercarnos a algunos juegos desconocidos para alguna gente y poder disfrutarlos sin perder la paciencia.
OFF TOPIC ->Personalmente, entiendo que cada vez los juegos sean más fáciles. Quieren llegar a más y más gente y el mercado se ha abierto. A muchos de los nuevos jugadores (y a los viejos jugadores que ahora tenemos que trabajar 8 horas al día y ocuparnos de las gestiones diarias y la familia) nos es imposible dedicarle a un juego muchas horas, y menos posible todavía si el juego es difícil y existe la posibilidad de atasco o agobio. Además, vamos teniendo una edad y ya no somos tan hábiles con el pad/teclado, ¿no os pasa? xD
Me ha gustado mucho, Andresito. Yo soy de la parte de los que además de Baldurs Gate y Fallout 1 y 2 y habiendo sido la experiencia con ellos muy satisfactoria siempre le cuesta mucho ponerse con juegos del estilo, más aún acostumbrado a la generación actual. Ya no sólo por el hecho de que te maten más o menos, hablo de que me da miedo afrontar Morrowind por el simple hecho de no tener una ‘brújula’ de misiones para moverte guiado por los desarrolladores con cierta tranquilidad.
Voy a comprar también Arcanum y a intentarlo, y si no pues me tendré que esperar a Project Infinity.
Veo que los de siempre siguen sin saber leer y, en consecuencia, sin entender nada. Al menos es divertido verlos sacar sus propias conclusiones y enfadarse con ellas.
Ya, claro, claro, el viejo truco del «yo no he dicho eso» para no reconocer cuando te has equivocado. Ala, ya está, como no nos entendemos, queda todo zanjado.
El ejemplo del Zork es bueno. Es un gran juegazo, pero está hecho tan a mala hostia que CASI parece que querían sacar pasta vendiendo guías del juego. Sería curioso pararse un rato a reflexionar el porqué antiguamente los juegos eran tan difíciles, tan a menudo relacionados simplemente con la falta de medios, habilidad en el diseño o empatía con el jugador (y como digo, en la era pre-GamesFaqs, las ganas de vender libros de pistas, guías de estrategia,etc.).
PS: Demasiado poco tiempo para jugar a videojuegos como para pasarlo muriendo una y otra vez en el minuto 1
Morrowind y alguna rata a la que temer al principio…para luego dar leña por un tubo a bichos voladores que duraban un suspiro y que terminaban cansando tanto que mejor dejarlo.
Pues CITA la frase, parte, extracto o texto exacto del artículo donde dice eso que te indigna tanto. Porque yo lo he leído y no dice nada de «el pasado es mejor».
Andresito, ni te he leido esto sinceramente, he hecho un offtopic modo abuelocebolleta, porque me apetecia compartir mis experiencias tan nostalgicas. Aiinnns!!
@handlolo: no iba por ti. xD
Debemos haber leído artículos distintos porque no es eso lo que yo he entendido.
Lo que yo he entendido es una crítica a los jugadores de esta última generación que, acostumbrados a que el juego comience con un tutorial de dos horas que les desgrane con ejemplos prácticos el funcionamiento de todas y cada una de las teclas y mecánicas del juego, les sueltas en clásicos de calidad como Baldur’s Gate y les parece malo y/o imposible porque mueren durante la primera media hora / una hora de juego.
Yo cada vez más pienso que los videojuegos AAA han pasado de ser un entretenimiento basado en la superación de desafíos a ser simplemente un entretenimiento con el que apagar el cerebro, y creo que el origen ha sido la masificación del videojuego, el tener que llegar a esa mayoría de la población que sólo enciende las neuronas para decidir cuándo dejar de hacer zapping.
Afortunadamente siempre nos quedarán las pequeñas desarrolladoras independientes que saben rescatar y explotar la esencia primigenia del videojuego: la diversión y la autosuperación.
En muchos juegos, morir es parte del juego. Hay juegos que dan por descontado que en los primeros contactos morirás, porque exigen aprender niveles o el mecanismo del juego en sí. Esto que está como muy aceptado en juegos de carreras (donde aprenderse el circuito es, siempre, fundamental), no se ve con tanta naturalidad en otros géneros.
Por otro lado, un juego difícil no quiere decir que esté mal diseñado, pero uno mal diseño sí desemboca a menudo en una dificultad desmedida. Y yo creo que, en la práctica, no es difícil diferencia un caso de otro. Yendo al lugar común que más o menos conocemos todos: los juegos de plataformas y la NES. Super Mario Lost Levels es un juego difícil, pero con un diseño y una curva de dificultad bien traídos; existe un entrenamiento por parte del jugador, pero no entrenamiento consciente como el que se pasa horas sumando puntos de experiencia en el JRPG estándar, sino un entrenamiento en el sentido de mejoría de habilidades del jugador, de manera gradual. Como el que va cada día una hora al gimnasio. Luego tenemos casos como el videojuego de Silversurfer (me remito al capítulo sibre el mismo de Angry Video Game Nerd, que podéis ver en YouTube, con subtítulos y todo), en el que no sólo la dificultad está desatada, sino que además es imposible un aprendizaje para superarla, porque todo parte de un mal diseño.
Y ya, my 5 cts, sólo…
Solo una cosa: si no habeis jugado a Arcanum aún, dadle una oportunidad. Lo puto mejor en casi todos los sentidos.
Otra cosa, hace un tiempo empezé una partida en el divine divinity, el primero (el ego draconis es de lo mejor en rpg’s en 3ª persona) y lo deje por aburrimiento al principio, estuve un rato largo matando esqueletos en una cueva de bastantes niveles y me parecio un mata-mata. ¿Deberia darle otra oportunidad?
También hay otro tipo de barrera para otro tipo de jugadores, no por la dificultad. Para gente que ha jugado a rol en papel y lápiz, set de reglas como el de Baldur’s Gate le pueden echar muy para atrás si está acostumbrado a D&D 3 o 3.5, que te descoloca una barbaridad el tener algo que es parecido pero que no termina de ser lo que tú conoces.
A mí eso es lo que me ha pasado con el Baldur’s, por desgracia, y lo lamento muchísimo, porque la historia me tenía enganchado, pero no aguanté más de 5 horas (conste que lo quiero retomar), pero notaba una cierta separación entre esas reglas y yo que me costaba solventar.
Este verano, ya con casi un año que hace que no juego a D&D para jugar a Cyberpunk, a ver si puedo acercarme mejor a esas reglas y no echarme para atrás, que se que merecerá la pena.
Creo que esa «suavización» de los juegos actuales depende del público al que están dirigidos. Los jugadores ya no son muchachos y niños pequeños con cientos de horas libres, ahora son tipos hechos y derechos que tienen que jugarse una partida en el poco tiempo libre que les queda a lo largo del día. Si solamente puedes echarle 1 hora y esa hora te la pasas con un nivel de ansiedad acojonante, mezclado además con un día laboral de mierda, mal vamos!
http://www.3djuegos.com/noticia/135056/2/estudio-perfil-jugador/ingles/
De todos modos, si esto solamente es un artículo para intentar venderle videojuegos difíciles a alguien que no le gusten, lo siento pero eso está crudo.
Curiosamente el otro día vi «Lawrence de Arabia» y ayer «El puente sobre el río Kwai». La primera me pareció mejor que la segunda.
En cualquier caso, estoy muy de acuerdo con el resto del artículo. Se nota sobremanera que en los juegos modernos es casi imposible que te maten en las primeras horas de juego.
En GOG.
Yo estoy en mi primera partida de Baldur’s Gate II, no jugué al uno, y los piedros me los lanzáis otro día.
Esta semana me encontré al final de un subterráneo un dragón rojo acojonante pero que me daba la opción de irme sin luchar dándole gracias por su misericordia, opción de diálogo tan realista que no pude más que darle, aceptar lo mierda que soy e irme. Esas cosas molan.
@Mask de Smith: ya verás qué gozada cuando vuelvas con un par de niveles más y le des al dragón rojo en su carita. O no.
Tampoco jugué al primer Baldurs, pero el segundo es, posiblemente, mi juego de rol preferido de todos los tiempos, y eso que debo confesar que nunca lo llegué a terminar (aunque fue más por el agotamiento progresivo sufrido tras explorarlo prácticamente todo, en lo que recuerdo fue una partida casi perfecta -la última de las muchas que inicié, por cierto -que por cualquier otra razón. Lo dejé al final de Suldanessallar. Ahh, mi personaje era un elfo arquero, que es lo que, si puedo, siempre elijo. El ataque a distancia más la pausa táctica era un gran cóctel, sin duda).
¡A los ojos Bubú, a los ojos!……..Sí, eran buenos tiempos.
PD: Creo que mi preferida de Lean estaría entre Pasaje a la India y Breve encuentro, la del puente siempre me ha parecido un pelín coñazo. Y el Statham no me mola nada, y sus pelis tampoco -bueno, Snatch y Lock and Stock, sí-).
Luego vas al multijugador y pasa lo que pasa.
http://gamewebcomic.com/?id=17