Cuando uno piensa en los antiguos juegos portátiles de Sonic, lo primero que se le viene a la cabeza son las entregas de Game Gear, si acaso otras más recientes como las de Game Boy Advance. Y la verdad es que salvando alguna que otra excepción no salen bien paradas en comparación con los juegos de 16 bits. Sin embargo, hay un título en 2D que merece la pena catar aparecido para Neo Geo Pocket Color… y eso que el erizo ya tenía lentillas verdes.
La vida de la portátil de SNK en sus dos iteraciones (monocroma y coloreada) corrió más o menos la misma suerte que Dreamcast. En Japón aguantó el tipo, teniendo de hecho un catálogo corto pero con una buena tanda de juegos de calidad (KOF R-2, dos Metal Slug o SNK vs Capcom: Match of the Millenium, por poner unos ejemplos), pero en el resto del mundo se fue al garete tanto por el aguante inicial de Game Boy Color como por la sobrada posterior que se pegó Game Boy Advance. Eso y que la publicidad que se hizo de la misma fue nula, dando al traste con sus posibilidades de expansión.
El caso es que antes de ir de la manita al infierno de las desarrolladoras de hardware, SEGA y SNK se aliaron para permitir conectividad vía cable entre Dreamcast y Neo Geo Pocket, así como para una mayor colaboración a la hora de crear juegos de sus franquicias en ambas consolas. Si bien SNK ya había exportado sus franquicias a sistemas como Mega Drive, Super Nintendo o Saturn, las incursiones segueras en territorio ajeno habían sido bastante raras. Con el acuerdo, Neo Geo Pocket Color acabó beneficiándose de las bondades de Sonic the Hedgehog Pocket Adventure.
Copypasteo maquillado
La verdad es que antes de enfrentarme a este cartucho esperaba un juego completamente nuevo, aunque como siempre presuponía la típica aparición en los primeros compases de entornos con palmeritas aliñados con tonos verdosos, marrones y azulados. De loopings gordacos y velocidad inicial para después pasar a escenarios con un desarrollo más pausado, que hiciesen pensar un poco más cada movimiento, cada salto, cada elección de recorrido.
Y efectivamente, obtuve todo eso. Lo que no suponía es que el resto del juego iba a ser un refrito enorme de los otros Sonic de 16 bits. Mirando el lado positivo, las mecánicas del erizo siguen intactas y no están contaminadas por los ataques teledirigidos que ya asomaban por su coetáneo Sonic Adventure, y aunque la sensación de déjà vu es grande el juego acaba siendo disfrutable.
A lo largo de las 8 zonas se pueden ver enemigos y recorridos sacados de Sonic 2 (hasta las pantallas especiales son copiadas), pero siempre con unas cuantas modificaciones que palian esa sensación de estar ante un simple demake. Como recompensa, a los que se lancen por las sempiternas esmeraldas les espera una fase final oculta. Aparte, a modo de extras, se añaden la búsqueda de una serie de piezas de puzle que forman varias imágenes ñoñas y un modo competitivo para dos jugadores como los que ya se veían en Sonic 2 y 3. Por otro lado y siguiendo con la tónica general del juego, la banda sonora recrea una buena selección de los temas de Sonic 3 y Sonic Jam. Si bien por las posibilidades de la portátil obviamente se pierde un poco de calidad con respecto a las canciones originales, Takushi Hiyamuta “Hiya!” (quien curró en Metal Slug 2 o Super R-Type entre otros) salva los muebles a la hora de versionar las diferentes pistas.
Con todo, a pesar de que esperaba algo nuevo, reconozco que he disfrutado con este Sonic.
En el fondo, es como el típico plato casero que tu madre lleva poniendo encima de la mesa veintidós años seguidos. Lo mismo tú prefieres que sea algo más original y que cambie un poco, pero el caso es que a pesar de que se repite más que el ajo, el papeo acaba estando bueno. Y qué cojones, decir que un Sonic plataformero en dos dimensiones resulta apañao’ no es poco.
Yo soy jodidamente fan de Neo-Geo Pocket y me hice con este juego en cuanto pude. Lo cierto es que llevas razón con esto de los niveles refritos pero yo no lo veo malo, disfrute bastante de esta entrega. Me mola cuando escribes por que nos suelen molar el mismo tipo de juegos xD.
@fastetc Conforme iba jugando me quedaba con cara de «joder, si esto TAMBIÉN lo he visto ya», pero cuando terminé me quedé bastante satisfecho. Con toda su sencillez cruje al 80% de los Sonic posteriores.
Pues a mí los Sonic Advance me gustaron, había uno o dos que se pasaban pulsando -> y punto pero uno de ellos, no recuerdo si era el 2 o el 3, estaba bastante bien.
Uno de los pocos juegos de Sonic que no he jugado. A ver si puedo catarlo aunque sea en emulador.