Odio profundamente los «momentos Nocilla» a la hora de leer un texto sobre cualquier juego, pero hoy me voy a permitir la licencia por un desencanto infantil. Digamos que servidor carecía de consola portátil hasta que llegó a casa la rebonica Game Boy Pocket. A la hora de elegir un par de juegos con los que empezar me compré en primer lugar Zelda Link’s Awakening, el puto mejor título de la consola y uno de los juegos a los que más cariño guardo. Por otra y aprovechando que se avecinaba el cumpleaños del menda, le dije a mi señora madre «cómprame cualquier Mario». No, no le hablé de Super Mario «Land«.
El caso es que tras mi cara de desolación inicial cuando vi el jueguico de marras, poco a poco el cartucho gris con ilustración de Mario haciendo de médico se fue ganando un sitio en mi patata particular por su sencilla pero apañada mecánica. Recordemos que entre finales de los 80 y principios de los 90 Tetris (y en particular su versión para Game Boy) se hinchó a vender copias a mansalva. El juego de Pajitnov se coló en los bolsillos de miles de chavalines, pero también en los de sus padres, ya fuese por las consolas de Nintendo o por las versiones chinorris que circulaban en los Todo a Cien. A su estela fueron apareciendo diferentes títulos que intentaban hacerse hueco en el mercado con propuestas similares: por poner un ejemplo, SEGA se hizo con los derechos de Columns y lo ultraexplotó en todas sus consolas, teniendo la misma Nintendo otros contendientes como Yoshi’s Cookie, quien comparte con Dr. Mario paternidad, firmada por el genio de Gunpei Yokoi. El creador de las Game & Watch no solo se dedicaba a virguerías como los Fire Emblem, los Metroid o Kid Icarus, sino que también poseía una pequeña predilección por juegos de corte Tetris.
Así, en 1990 aparece Dr. Mario, donde el bigotudo deja la fontanería a la que nunca se dedicó y se pone una bata de médico. Su objetivo es el de eliminar una serie de virus que pululan en un tarro a base de un ejército de pastis que van cayendo de forma ordenada y aleatoria desde la parte superior de la pantalla. De una forma relativamente parecida a la que presentaba el ya mencionado Columns, había que agrupar como mínimo bloques de cuatro virus o pastillacas para que estos desaparecieran, finalizando la partida si llenábamos la pantalla hasta arriba. Efectivamente, es todo muy Tetris, y aunque no sea tan brillante posee ese toque de personalidad que lo distingue de sus competidores y que lo hace tan aprovechable.
Las dos consolas que disfrutaron sus encantos fueron las 8 bits de Nintendo. Teniendo la NES una versión coloreada, la de Game Boy se conformaba con su reducido cromatismo, pero no por ello el juego perdía mucho con respecto a su hermana mayor, ya que se bastaba con las formas proporcionadas a los virus para suplir la ausencia de color. Con el tiempo, los genios de Ninty aprovecharon una franquicia más que olvidada y malparieron Dr. Luigi para Wii U, al que ponen bonito para los estándares actuales, añaden un par de pijotadas mecánicas et voilà, ahí queda un (mal) refrito. Si queréis echar un buen rato dejaos de tonterías, pillad cualquiera de las versiones originales y dadle duro. Dr. Mario desde luego no es un Super Mario al uso, pero sigue siendo un buen cartucho.
https://www.youtube.com/watch?v=3ziH6tVJwEU
Este juego me lo «regaló» mi padre para la NES. En realidad lo quería para viciarse él, que siempre le gustaron los Tetris.
Años después, por el 95 i 96, sacaron un plagio absoluto de su propio juego y lo llamaron Tetris 2. La secuelaca. Y no deja de tener gracia cómo la saga que intentaba ser copiada e igualada por todos acaba bebiendo de sus hijos bastardos.
Tutututututututututu tu, tutututututu tu tu.
Es todo lo que tengo que decir al respecto.
Lo más cercano que he jugado a un Dr.Mario es al minijuego que traía Brain Age 2 que es básicamente lo mismo, hasta la música es parecida: https://www.youtube.com/watch?v=3sgP20MU9KU
Lo tuve durante la primera hornada de cartuchos, que me llegaron en el siguiente orden: (por acompañarte en tu momento Nocilla): Tetris, World Cup y Spiderman, casi el mismo día, y Gargoyles Quest, Lock n’Chase, Quarth, Dr. Mario, Super Mario Land, Tennis, Golf y Alleway, el mismo día (junto a una funda y un soporte con luz). Un amigo forrado de mi bro mayor se los compró por moda, no le gustaron y me tocó la lotería XD
Tetris y Quarth me sedujeron mucho más de entrada (y de salida también). Pero años después redescubrí al Doctor M gracias a un cartucho de 32 en 1 que cayó en mis manos. Cómo son las cosas…
Otro de puzzles que tenía su aquel era Pipe Dream.
Pues nada mal, y vaya potra por tu parte. Esos Tetris, Gargoyle’s, Dr. Mario, Super Mario Land y cía no son precisamente moco de pavo.
Espero que hayas guardado el Gargoyle’s Quest completico, que puede llegar a valer 50 pavacos en ebay (aunque yo probablemente no lo vendería si lo tuviera, que conste).
Yo jugaba con mi hermano a este juego, y al Battle City, en una Super Nintendo con un cartucho piratuelo que tenia muchos juegos de NES. Básicamente jugábamos por el multi. Porque de los tropecientos solo había esos dos eran los que mas nos gustaban. O habria mas pero no los recuerdo. En cualquier caso buenos momentos con mi hermano jugando en paralelo.
@Gamboi: que va, que va; ni lo vendo, ni lo conservo completo XD
Pues del pack de inicio guardo especial cariño por Lock n’Chase -una especie de pacman del robo muy bien parido- y Quarth -mezcla de shoot’em up y puzzle- … y por supuesto Super Mario Land. Tenía un noséqué que siempre me hizo preferirlo al 2 (objetivamente mucho más ósom).
Mmmf.. no llegué a probar Dr. Mario con cable Link :-(
Este juego lo tuve en la típica colección de 99 en 1 para la Game Boy Ladrillo™, de hecho de vez en cuando lo vuelvo a visitar de cuando en cuando junto a un WWF Superstars en Japonés. Por cierto, ¿cómo es que no habéis enlazado este glorioso temazo https://www.youtube.com/watch?v=pc-EP-0xEDQ ?